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En un comunicado público, la precandidata presidencial Ingrid Betancourt anunció este sábado su retiro de la Coalición Centro Esperanza, en rechazo a la postura asumida por los otros seis precandidatos de la alianza en torno a los apoyos políticos a aceptar en la campaña, en concreto, por lo sucedido con Alejandro Gaviria, quien esta semana anunció la adhesión de los senadores Germán Varón, de Cambio Radical y Miguel Ángel Pinto, del Partido Liberal. La exrehén de las Farc dijo que seguirá en solitario su campaña por la primera magistratura del Estado con su partido Verde Oxígeno, que recientemente recibió la personería jurídica por parte del Consejo Nacional Electoral (CNE) y tiene actualmente avalados a Sergio Fajardo y Carlos Amaya.
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“Recibimos una respuesta por parte de la Coalición Centro Esperanza. Se señala la entrada de apoyos de las maquinarias como un error que se lamenta. Sin embargo, no anuncia acción con respecto a los apoyos ya recibidos de las maquinarias a Alejandro Gaviria. Esta falta de posición clara nos obliga a asumir el liderazgo de una batalla que tenemos que dar y ganar en Colombia por una política limpia, justa y que no le robe las oportunidades a los 51 millones de colombianos que estamos secuestrados por la corrupción”, manifestó la líder del partido Verde Oxígeno, que recientemente recibió la personería jurídica por parte del Consejo Nacional Electoral (CNE), que avaló las aspiraciones de Sergio Fajardo y Carlos Amaya.
Y agregó: “En estas condiciones, nos vemos obligados a dar un paso al costado de la Coalición Centro Esperanza. Seré candidata independiente a la Presidencia por el partido Verde Oxígeno. Un partido que no hace concesiones en la lucha frente a la maquinaria porque aquí no puede haber zonas grises. Asumimos esta responsabilidad y convocamos a todos los colombianos y las colombianas, que están en contra de la corrupción, a que construyamos unidos este camino para liberarnos de la corrupción.
Este mismo sábado, cinco de los precandidatos de la Coalición Centro Esperanza (Fajardo, Amaya, Jorge Robledo, Juan Fernando Cristo y Juan Manuel Galán), también en una declaración pública, insistieron en la necesidad de consolidar la unidad de cara a la elección presidencial y cuestionaron las posturas asumidas por Betancourt y Gaviria, la primera por haber ventilado públicamente y antes de hablarlo con todos sus discrepancias por lo que considera ha sido la llegada de maquinarias políticas tradicionales a la campaña del exministro de Salud. E igualmente calificaron como una “equivocación” el que Gaviria hubiese aceptado los apoyos de Varón y Pinto.
Sin embargo, quedó claro que cada quién debería asumir la responsabilidad de sus campañas. En un trino, Juan Manuel Galán señaló: “No acepto ningún ultimátum, esa no es nuestra forma de hacer política. Esta es mi posición personal frente a los apoyos políticos a integrantes de la Coalición de Centro Esperanza. Sigamos lo acordado en noviembre y que cada candidato asuma el costo de sus apoyos”. Un claro mensaje a Betancourt, quien precisamente había puesto como plazo las 12:00 del mediodía de este sábado para que se diera una posición firme frente a la situación de Gaviria.
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El gran interrogante que se abre ahora es qué va a pasar con los avales de Fajardo y Amaya. Si bien, según definió el CNE, los partidos políticos que están participando de una coalición política pueden tener varios precandidatos presidenciales para participar en las consultas del próximo 13 de marzo, es claro que la salida de Ingrid Betancourt de la alianza de centro implica también la salida de Verde Oxígeno. Así las cosas, a los dos les tocará busca otra tolda, entre las colectividades y movimientos, que hacen parte de Centro Esperanza, para poder aspirar.
Sea como sea, el hecho protagonizada por Betancourt significa un duro golpe para el centro político y algo que puede ser leído por la opinión pública como una incapacidad de generar consensos, más allá de las discrepancias y los egos. Y eso les puede costar (o les va a costar) electoralmente.