Las conclusiones del primer cónclave entre la Fiscalía y la JEP
El fiscal Néstor Humberto Martínez y Patricia Linares, presidente de la JEP, aseguraron que, a pesar de las diferencias, caminarán hacia el mismo objetivo. Definieron algunos de los puntos gruesos que se discutirán en las mesas técnicas.
-Redacción Política
La principal palabra que define la primera sesión reservada que hubo entre las comisiones de Paz de Cámara y Senado, la Fiscalía, la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) y otras instituciones y organismo que tienen que ver con la implementación del acuerdo de paz con las Farc, es éxito.
Después de casi dos horas de reunión, tanto la Fiscalía como la JEP, que han tenido fuertes choques en cuanto a los procesos que tiene que ver con la arquitectura institucional para el funcionamiento del nuevo tribunal, acordaron algunos de los puntos gruesos que se discutirán en una serie de mesas técnicas que se instalarán para, precisamente, concertar los mecanismos a seguir y acordar cuáles son las modificaciones legales o constitucionales que se necesitan para evitar futuras fricciones.
“La reunión ha sido muy exitosa. Todos han reconocido la mediación de la Comisión de Paz y lo que queremos es que todas las cosas que de pronto parecen enfrentamientos, simplemente se limen. Creo que se ha logrado el objetivo, pero seguiremos reuniéndonos. La Comisión de Paz es una facilitadora para que este proceso avance”, señaló la senadora Aída Avella, quien hace parte de la Comisión de Paz de Senado.
Por su parte, el fiscal general Néstor Humberto Martínez señaló que hay el mejor de los ánimos y que la intención es caminar hacia la misma dirección a pesar de las diferencias en opiniones legales que pueda haber. “Fue una reunión maravillosa y vamos a seguir remando en el mismo sentido”, dijo Martínez, y negó que hubiese habido un “choque de trenes” entre ambas jurisdicciones.
Asimismo, explicó que uno de los puntos grandes que se tocó en la primera reunión tuvo que ver con la comparecencia de terceros a la JEP y que, si bien el Congreso decidió que todos debían ir a la JEP, al Corte Constitucional dispuso que los terceros debían ser objeto de investigación de la jurisdicción ordinaria y, eventualmente y por su propia voluntad, someterse a la JEP.
“Esa es una mala arquitectura y nosotros hemos propuesto que se vuelva al diseño inicial porque hacer investigaciones para que cuando los imputemos pidan irse a la JEP es un derroche de jurisdicción, una pérdida en la justicia y no le hace bien al sistema”, argumentó el fiscal.
A su turno, Patricia Linares, presidenta de la JEP, celebró la disposición del Gobierno Nacional para apoyar el proceso de reintegración y consolidación del sistema de justicia. “Acordamos homogenizar el lenguaje y las comunicaciones para que la ciudadanía y las víctimas tengan tranquilidad. Que sepan que, a pesar de las diferencias, caminamos el mismo camino y aspiramos a llegar al mismo propósito”, dijo Linares.
Dejó claro, además, que no se tratará en las mesas técnicas sobre ningún caso en particular que se esté estudiando en la JEP, luego de que se resistiera a hablar del caso de Jesús Santrich, uno de los líderes del partido FARC que está en reclusión carcelaria desde el pasado 9 de abril, pedido en extradición por un juez de Estados Unidos.
La principal palabra que define la primera sesión reservada que hubo entre las comisiones de Paz de Cámara y Senado, la Fiscalía, la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) y otras instituciones y organismo que tienen que ver con la implementación del acuerdo de paz con las Farc, es éxito.
Después de casi dos horas de reunión, tanto la Fiscalía como la JEP, que han tenido fuertes choques en cuanto a los procesos que tiene que ver con la arquitectura institucional para el funcionamiento del nuevo tribunal, acordaron algunos de los puntos gruesos que se discutirán en una serie de mesas técnicas que se instalarán para, precisamente, concertar los mecanismos a seguir y acordar cuáles son las modificaciones legales o constitucionales que se necesitan para evitar futuras fricciones.
“La reunión ha sido muy exitosa. Todos han reconocido la mediación de la Comisión de Paz y lo que queremos es que todas las cosas que de pronto parecen enfrentamientos, simplemente se limen. Creo que se ha logrado el objetivo, pero seguiremos reuniéndonos. La Comisión de Paz es una facilitadora para que este proceso avance”, señaló la senadora Aída Avella, quien hace parte de la Comisión de Paz de Senado.
Por su parte, el fiscal general Néstor Humberto Martínez señaló que hay el mejor de los ánimos y que la intención es caminar hacia la misma dirección a pesar de las diferencias en opiniones legales que pueda haber. “Fue una reunión maravillosa y vamos a seguir remando en el mismo sentido”, dijo Martínez, y negó que hubiese habido un “choque de trenes” entre ambas jurisdicciones.
Asimismo, explicó que uno de los puntos grandes que se tocó en la primera reunión tuvo que ver con la comparecencia de terceros a la JEP y que, si bien el Congreso decidió que todos debían ir a la JEP, al Corte Constitucional dispuso que los terceros debían ser objeto de investigación de la jurisdicción ordinaria y, eventualmente y por su propia voluntad, someterse a la JEP.
“Esa es una mala arquitectura y nosotros hemos propuesto que se vuelva al diseño inicial porque hacer investigaciones para que cuando los imputemos pidan irse a la JEP es un derroche de jurisdicción, una pérdida en la justicia y no le hace bien al sistema”, argumentó el fiscal.
A su turno, Patricia Linares, presidenta de la JEP, celebró la disposición del Gobierno Nacional para apoyar el proceso de reintegración y consolidación del sistema de justicia. “Acordamos homogenizar el lenguaje y las comunicaciones para que la ciudadanía y las víctimas tengan tranquilidad. Que sepan que, a pesar de las diferencias, caminamos el mismo camino y aspiramos a llegar al mismo propósito”, dijo Linares.
Dejó claro, además, que no se tratará en las mesas técnicas sobre ningún caso en particular que se esté estudiando en la JEP, luego de que se resistiera a hablar del caso de Jesús Santrich, uno de los líderes del partido FARC que está en reclusión carcelaria desde el pasado 9 de abril, pedido en extradición por un juez de Estados Unidos.