El Partido Conservador le ha solicitado al Gobierno conocer el proyecto de reforma tributaria que el Ejecutivo presentará al Congreso. Aunque aún no se sabe a ciencia cierta qué cambios contiene, la discusión ha sido polémica, pues la información filtrada a los medios y las declaraciones de los propios funcionarios del Ministerio de Haciendan habla de gravar productos básicos de la canasta familiar para recoger el dinero necesario para hacerle frente a la crisis económica por la pandemia.
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Mientras en un principio se dijo que se gravarían elementos como el café y el azúcar, el presidente Iván Duque salió recientemente a negar esas suposiciones. “Voy a decirlo de una forma muy diáfana. Esos cuatro productos se van a mantener como están hoy. Los que de esos cuatro tienen IVA cero se mantendrán en IVA cero. Los que tengan IVA cinco se mantendrá en IVA cinco tal y como están, es decir, no sufrirán ningún incremento”, afirmó Duque hace dos días, desautorizando las palabras de Juan Alberto Londoño, viceministro de Hacienda y quien expresó que dichos productos, al igual que el chocolate y la sal, no eran de consumo básico para los colombianos.
En el marco de ese tire y jale del Gobierno, la colectividad azul se reunió ayer para discutir en torno a lo que se sabe de la reforma tributaria. De esa reunión, aunque no salieron declaraciones amplias, se dejó la consigna de que los conservadores desean aportar al proyecto, no sin antes conocer las consecuencias económicas para las clases socioeconómicas más afectadas por la pandemia del COVID-19.
“Consciente como es el Partido de la situación fiscal, del tamaño de la deuda, y del alivio social que es preciso cubrir, quiere prestar su concurso para este fin, pero no sin antes vislumbrar los efectos sobre la economía, y muy particularmente sobre la masa de contribuyentes de sector medio y popular colombianos”, anotó la organización política.
En ese sentido fueron también las palabras de Omar Yepes, presidente del Partido Conservador. El jefe de la colectividad insistió hace unos días en Twitter en que es incuestionable el déficit fiscal acentuado por la pandemia y la necesidad de una reforma. Sin embargo, añadió: “El problema es cómo [hacerla]. La reforma debe gravar a quien tiene, pero hacerlo sin provocar desestímulos”, dijo.
