Previo a paro, citan a debate de control político a ministros de Hacienda y Trabajo 

Un día antes del paro del próximo jueves 21 de noviembre, desde la Comisión Séptima del Senado se citará a un debate de control político a los ministros de Hacienda, Alberto Carrasquilla, y del Trabajo, Alicia Arango, así como a funcionarios del Fondo Nacional del Ahorro. 

En contexto: El caldeado ambiente en torno al paro del 21 de noviembre

De acuerdo con el senador Alberto Castilla, del Polo Democrático, se busca que los funcionarios expliquen las reformas e iniciativas legislativas que se ha anunciado el Gobierno, entre ellas la laboral y la pensional que, dijo el congresista, “han desatado grandes inconformidades dentro de distintos sectores sociales”. 

“Se busca conocer de parte del Gobierno los detalles de las propuestas que contendrán las ya anunciadas reforma laboral y pensional (…) Se pretende también que cese la desinformación, verdades a medias y tergiversaciones de los contenidos reales de estas iniciativas”, declaró el legislador. 

El congresista criticó que hayan sido voceros de algunos gremios los que hayan dado a conocer fragmentos de las propuestas, lo que se ha prestado para especulaciones. En esa línea, recordó que fue la ANIF (Asociación Nacional de Instituciones Financieras) la que propuso que se les pagara el 75 % del salario mínimo a jóvenes trabajadores de menos de 25 años y el anuncio de la ministra del Trabajo sobre contratación por horas, así como el ruido generado por el supuesto incremento de la edad de pensión, la eliminación de la prima media y el pago de intereses sobre cesantías ahorradas.  

“La gente en los territorios y la opinión pública en general necesita tener claridad y detalles sobre las intenciones del Gobierno de Iván Duque y los partidos que lo respaldan sobre temas que generan tanta preocupación como lo son el trabajo y las pensionales”, agregó Castilla. 

Lea también: Duque y organizaciones sindicales respaldan la protesta pero rechazan uso de violencia

Convocado por las centrales obreras y organizaciones sociales, estudiantiles y de oposición política, Colombia se prepara para el paro nacional del próximo jueves 21 de noviembre, en medio de un ambiente tenso alimentado por el cruce de mensajes amenazantes en las redes sociales y teniendo como espejo las multitudinarias movilizaciones de Chile y Ecuador.  

Aquí el anuncio del paro se ha convertido en un tire y afloje entre el Gobierno y sus aliados, que consideran que los motivos que se esgrimen para la protesta están fundamentados en mentiras, y sus promotores, que ven lesivas las políticas económicas y sociales del presidente Iván Duque. 

Según los organizadores del paro, este se da en contra de la reforma laboral que se planea implementar; contra le anunciada reforma pensional, que según los sindicatos apunta a quitar derechos y privatizar Colpensiones; contra la venta de algunas entidades estatales; contra la corrupción, el aumento de las tarifas de energía y la rebaja de impuestos a las grandes multinacionales para imponer más tributos a la clase media.  

También reclaman por un salario mínimo digno; por el cumplimiento de los acuerdos firmados con profesores, trabajadores estatales, estudiantes, indígenas y el agro, y por la defensa misma de la protesta social, que algunos sectores insisten en que se debe regular. 

Argumentos que, como lo ha dicho el presidente Duque, están fundamentados en “mentiras” y lo que buscan es “incendiar la sociedad y que haya pugnacidad entre los colombianos”. De hecho, el mandatario advirtió que se está promoviendo que la protesta sea “a través de la violencia”.  

“Tenemos que pararnos firmes como sociedad, ponernos la mano en el corazón y reconocer que no es a través de la violencia, que no es a través de las agresiones, como logramos las transformaciones sociales”, remató el jefe de Estado, quien ha recalado que las reformas a proponer en materia laboral y pensional serán llevadas, antes que todo, a la Mesa de Concertación. 

Un día antes del paro del próximo jueves 21 de noviembre, desde la Comisión Séptima del Senado se citará a un debate de control político a los ministros de Hacienda, Alberto Carrasquilla, y del Trabajo, Alicia Arango, así como a funcionarios del Fondo Nacional del Ahorro. 

En contexto: El caldeado ambiente en torno al paro del 21 de noviembre

De acuerdo con el senador Alberto Castilla, del Polo Democrático, se busca que los funcionarios expliquen las reformas e iniciativas legislativas que se ha anunciado el Gobierno, entre ellas la laboral y la pensional que, dijo el congresista, “han desatado grandes inconformidades dentro de distintos sectores sociales”. 

“Se busca conocer de parte del Gobierno los detalles de las propuestas que contendrán las ya anunciadas reforma laboral y pensional (…) Se pretende también que cese la desinformación, verdades a medias y tergiversaciones de los contenidos reales de estas iniciativas”, declaró el legislador. 

El congresista criticó que hayan sido voceros de algunos gremios los que hayan dado a conocer fragmentos de las propuestas, lo que se ha prestado para especulaciones. En esa línea, recordó que fue la ANIF (Asociación Nacional de Instituciones Financieras) la que propuso que se les pagara el 75 % del salario mínimo a jóvenes trabajadores de menos de 25 años y el anuncio de la ministra del Trabajo sobre contratación por horas, así como el ruido generado por el supuesto incremento de la edad de pensión, la eliminación de la prima media y el pago de intereses sobre cesantías ahorradas.  

“La gente en los territorios y la opinión pública en general necesita tener claridad y detalles sobre las intenciones del Gobierno de Iván Duque y los partidos que lo respaldan sobre temas que generan tanta preocupación como lo son el trabajo y las pensionales”, agregó Castilla. 

Lea también: Duque y organizaciones sindicales respaldan la protesta pero rechazan uso de violencia

Convocado por las centrales obreras y organizaciones sociales, estudiantiles y de oposición política, Colombia se prepara para el paro nacional del próximo jueves 21 de noviembre, en medio de un ambiente tenso alimentado por el cruce de mensajes amenazantes en las redes sociales y teniendo como espejo las multitudinarias movilizaciones de Chile y Ecuador.  

Aquí el anuncio del paro se ha convertido en un tire y afloje entre el Gobierno y sus aliados, que consideran que los motivos que se esgrimen para la protesta están fundamentados en mentiras, y sus promotores, que ven lesivas las políticas económicas y sociales del presidente Iván Duque. 

Según los organizadores del paro, este se da en contra de la reforma laboral que se planea implementar; contra le anunciada reforma pensional, que según los sindicatos apunta a quitar derechos y privatizar Colpensiones; contra la venta de algunas entidades estatales; contra la corrupción, el aumento de las tarifas de energía y la rebaja de impuestos a las grandes multinacionales para imponer más tributos a la clase media.  

También reclaman por un salario mínimo digno; por el cumplimiento de los acuerdos firmados con profesores, trabajadores estatales, estudiantes, indígenas y el agro, y por la defensa misma de la protesta social, que algunos sectores insisten en que se debe regular. 

Argumentos que, como lo ha dicho el presidente Duque, están fundamentados en “mentiras” y lo que buscan es “incendiar la sociedad y que haya pugnacidad entre los colombianos”. De hecho, el mandatario advirtió que se está promoviendo que la protesta sea “a través de la violencia”.  

“Tenemos que pararnos firmes como sociedad, ponernos la mano en el corazón y reconocer que no es a través de la violencia, que no es a través de las agresiones, como logramos las transformaciones sociales”, remató el jefe de Estado, quien ha recalado que las reformas a proponer en materia laboral y pensional serán llevadas, antes que todo, a la Mesa de Concertación.