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Durante un debate en el Congreso se presentó de nuevo un episodio de esos que ya son típicos en la política colombiana. La discusión, en los últimos meses, se ha centrado, en buena parte, en el hecho de que la exguerrilla hará política legal por primera vez en cincuenta años de existencia. Aunque ha habido voces que lo apoyan, muchas otras han mostrado su franco descontento con esta situación y de esas, una de las que más resalta, es la del Centro Democrático, el partido del expresidente y ahora senador, Álvaro Uribe Vélez.
Antes y después de que se firmara el acuerdo, los uribistas se han mostrado completamente en contra de ser colegas de los jefes desmovilizados de la ahora llamada Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común, con episodios como la del congresista Edward Rodríguez diciéndole asesino a Jesús Santrich durante un debate en la Comisión Primera de la Cámara de Representantes.
(Lea aquí: Participación política de Farc estaría en vilo).
Uno de los más recientes episodios se dio cuando, durante un debate, la representante uribista María Fernanda Cabal, además de defender el gobierno de Uribe (asegurando que, por ejemplo, entre 2002 y 2010 pasaron de ser 30 mil muertos al año a 14 mil), estaba hablando de la responsabilidad de los partidos políticos en la violencia y aseguró, de forma un tanto sarcástica, que “los verdes vienen del M-19, qué bonita historia la del M-19 con el Palacio de Justicia”.
(También: Santrich pierde tutela con la que reclamaba que no lo llamaran asesino).
Hace poco, además, Bustamante estuvo involucrado en la misma discusión de la participación de los más recientes desmovilizados, tema que seguirá vigente después de las elecciones de 2018. El congresista uribista, al igual que sus compañeros de partido, criticó duramente que al Congreso vayan a llegar varios exguerrilleros de las Farc. A pesar de que él también fue indultado, en entrevista con Blu Radio aseguró que “ese proceso de negociación ha debido someterse a los mismos parámetros constitucionales y jurídico con que funcionó el proceso más exitoso, que fue el del M-19”.