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Un informe elaborado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), y que fue publicado el miércoles (13 de julio) alerta sobre las desigualdades salariales de género en el sector de la salud y el cuidado.
Tras analizar datos de 54 países, los cuales representan alrededor del 40 % de los trabajadores asalariados de este sector en todo el mundo, las organizaciones encontraron que las mujeres ganan, en promedio, un 24 % menos que sus compañeros hombres. Es decir, casi una cuarta parte menos que sus colegas. (Puede leer: Colombia va camino a tener otro año récord de muertes en las vías)
Esto, resaltan los investigadores, a pesar “del alto grado de feminización en el sector de la salud y asistencial”. Según el documento, titulado Diferencias salariales entre hombres y mujeres en el sector sanitario y asistencial: Un análisis global en la era de la COVID-19, las mujeres representan alrededor del 67 % del empleo mundial en el sector, una cifra que aumenta hasta el 75,3 % en los países de ingresos altos.
Al respecto, Jim Campbell, director de Personal de Salud de la OMS, dijo: “Las mujeres constituyen la mayoría de los trabajadores en el sector de la salud y la atención, pero en demasiados países los sesgos sistémicos están dando como resultado sanciones salariales perniciosas en su contra”. (Le puede interesar: Las 14 EPS en proceso de liquidación según la Supersalud)
La investigación resalta que “al comparar las brechas salariales de género en el sector de la salud y asistencia con las de otros sectores económicos ajenos a la salud (...) [las primeras] suelen ser más amplias que en otros sectores”.
En el documento, las agencias también se preguntaron el por qué de esta brecha salarial. Sobre esto, apuntaron que hay dos factores que pueden ayudar a explicar esta desigualdad. En algunos países, dice el informe, “los hombres en el mercado laboral suelen tener una edad más avanzada -y, por consiguiente, más experiencia- y tienen un nivel más alto de educación superior en comparación con las mujeres”. Esto último, lleva a que los hombres estén sobrerrepresentados en categorías profesionales con remuneraciones superiores donde la brecha salarial es aún más amplia. (También puede leer: Pandemia de covid-19 está lejos de haber terminado y se mantiene emergencia: OMS)
“Las madres que trabajan en el sector sanitario y asistencial parecen sufrir penalizaciones adicionales. Durante los años de reproducción de la mujer, las diferencias salariales entre hombres y mujeres en el sector aumentan considerablemente”, enfatiza la investigación en lo que denomina “brecha por maternidad”.
Sin embargo, advierten, “la mayor parte de la brecha salarial de género sigue sin poder explicarse con los datos disponibles sobre los atributos en el mercado laboral (...) Esto implica que las mujeres que trabajan en el sector están mal remuneradas por sus características en el mercado laboral en comparación con los hombres que tienen perfiles similares”. (Puede interesarle: En más del 80 % de las muestras de orina de estadounidenses encontraron glifosato)
A pesar de que la pandemia por covid-19 puso en el centro el papel que desempeñan las personas de este sector, tanto la OIT como la OMS lamentaron que durante 2019 y 2020 solo se hubieran presentado mejores marginales en la igualdad salarial.
Dentro de las recomendaciones que hicieron las organizaciones para disminuir esta brecha se encuentra, en primer lugar, mejorar la calidad de los datos disponibles sobre esta desigualdad. Esto serviría para efectuar evaluaciones oportunas de las condiciones de trabajo del personal. También instaron a invertir en empleos decentes y a reducir la segregación de género “atrayendo a más hombres a las categorías profesionales de nivel medio y ofreciendo formación e igualdad de oportunidades para las trabajadoras”. (También puede leer: Agentes del sector salud están dispuestos a dialogar sobre reforma anunciada)
“No podemos tener unos servicios sanitarios y asistenciales de mayor calidad sin unas condiciones de trabajo mejores y más justas, incluidos unos salarios más justos, para los trabajadores sanitarios y asistenciales, la mayoría de los cuales son mujeres. Ha llegado el momento de tomar medidas políticas decisivas, incluido el necesario diálogo político entre instituciones”, concluyó Manuela Tomei, directora del Departamento de Condiciones de Trabajo e Igualdad de la OIT.