A mitades de junio el Ministerio de Salud anunció que había tomado la decisión de ampliar el plazo entre la primera y segunda dosis de la vacuna Pfizer. Ya no sería de 21 días sino de 12 semanas (pero solo aplicaría para los menores de 50 años). La decisión generó gran confusión, pues mientras muchos argumentaban que no existía evidencia científica robusta para que la cartera tomara esta decisión, otros se referían a los recientes estudios realizados con programas de vacunación que apuntan a que, si se retrasa el segundo pinchazo, la respuesta de los anticuerpos puede ser incluso mayor. (Lean acá: Amplían tiempo de segunda dosis de Pfizer en Colombia)
Como lo contó El Espectador hace algunos días, se trata de una decisión que busca maximizar los beneficios colectivos a la vez que se va construyendo nueva evidencia. (Lea también: ¿Desconfianza tras el enredo de las dosis de Pfizer? Un texto para recuperarla)
Sin embargo, esta confusión dio pie para que algunas personas recurrieran a otras vías para garantizar la segunda dosis de Pfizer a los 21 días. Este fue el caso de un ciudadano en Cartagena que puso una acción de tutela exigiendo que el Ministerio de Salud cumpliera con el cronograma de vacunación presentado inicialmente y que fue fallado a su favor por el Juzgado Cuarto Civil del Circuito de Cartagena.
En el fallo se explica que el ciudadano sufre de discapacidad visual, está casado con una persona que solo tiene un pulmón y que sus hijos son gemelos prematuros, por lo que “está en riesgo”. “Por esta razón, le asiste el afán de completar el esquema de vacunación, pues así podría empezar a vivir de nuevo una vida medianamente normal”. (Acá también: ¿Cuál es el efecto de prolongar la segunda dosis de Pfizer en Colombia?)
Para este caso, específicamente, el Juzgado le ordena al Ministerio de Salud y a la Nueva EPS que, en el termino de 48 horas, contadas una vez las entidades sean notificadas, se le aplique la segunda dosis de Pfizer contra el COVID-19 al accionante.
En el fallo el Ministerio de Salud explica que la vacuna no pierde su efectividad si la segunda dosis no es aplicada a los 21 días y que “con la mejor evidencia disponible a la fecha es bastante probable que diferir la segunda dosis por unas semanas no tenga un efecto negativo en la protección contra el Covid-19, y por el contrario se observe una mejor eficacia”.
En el documento también se cita la posición de la Universidad de Cartagena. A través del Decano de la Facultad la institución señala que un reciente estudio apunta a que “retrasar la segunda dosis podría resultar en hasta un 20% menos de mortalidad para tasas de vacunación del 0.1% al 0.3% de la población por día y una eficacia de la vacuna de una dosis del 80% o más”, entre otros datos que arroja.
De hecho, en el fallo también se dice que la decisión del Ministerio es considerada como acertada por la Sociedad Colombiana de Infectología. Sin embargo, y pese a los argumentos, el fallo del Juzgado sigue considerando que la evidencia científica no es suficiente.