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Elon Musk, en su primer discurso a los empleados de Twitter Inc. desde que adquirió la empresa por US$44.000 millones, dijo que la bancarrota era una posibilidad.
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Yoel Roth y Robin Wheeler, dos ejecutivos que hasta hoy figuraban como parte del nuevo equipo de liderazgo de Elon Musk, renunciaron, según otra persona familiarizada con el asunto, que pidió no ser identificada.
Musk removió a la mayor parte del equipo ejecutivo sénior de la red social cuando concluyó su adquisición el mes pasado. Desde entonces, Roth lideraba todos los esfuerzos de confianza y seguridad de la red social, mientras que Wheeler, vicepresidenta de ventas, se había hecho cargo recientemente de supervisar las relaciones con los anunciantes —que, de hecho, mostraron preocupación por el contenido—.
La red social tiene una carga de deuda significativa por la adquisición y ha enfrentado una especie de rechazo por parte de algunos anunciantes que están preocupados por los planes de Musk sobre la moderación del contenido. The Information y Platformer informaron anteriormente sobre el comunicado de bancarrota de Musk.
Musk también le dijo al personal en la llamada que la era de la comida gratis y otros beneficios se terminó en las oficinas de Twitter, dijo la persona.
Sobre las finanzas y el futuro de Twitter, Musk dijo que la compañía necesitaba actuar prontamente para que su producto de suscripción de US$8 llamado Twitter Blue se convierta en algo que los usuarios quieran pagar.
En un correo electrónico el miércoles, Musk advirtió a los empleados sobre los “tiempos difíciles que se avecinan” y dijo que “no hay forma de endulzar el mensaje” sobre las perspectivas económicas de la empresa. También indicó que no habrá trabajo remoto a menos que él lo aprobara personalmente.
El multimillonario recientemente recortó la mitad del personal de Twitter e introdujo cambios drásticos en sus reglas de suscripción. El jueves, tras los cambios, múltiples anunciantes principales fueron suplantados por cuentas con marcas de verificación azules.
Anteriormente el jueves, salieron los ocupantes de la dirección de seguridad de la información, la dirección de privacidad y la dirección de cumplimiento de Twitter, lo que plantea preocupaciones sobre la capacidad de la empresa para mantener la seguridad de su plataforma y cumplir con las normas reglamentarias. Actualmente, Twitter está sujeto a un decreto de consentimiento con la Comisión Federal de Comercio que regula cómo la empresa maneja los datos de los usuarios y podría estar sujeto a multas por violaciones.