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Las bolas de criptomonedas, los inversionistas y sus asesores fueron sorprendidos el miércoles cuando se publicó un acuerdo bipartidista del Senado sobre infraestructura que que incluía un aumento a gran escala en los requisitos para que los corredores de criptomonedas y los inversionistas informen sus transacciones al Servicio de Impuestos Internos.
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La razón de la inclusión de última hora: la propuesta recaudaría una gran cantidad de dinero para ayudar a financiar la inversión de US$550.000 millones en mejoras de transporte y servicios públicos.
La propuesta, que actualiza las normas que obligan a los corredores a informar las transacciones en criptomonedas y a las empresas que invierten en criptomonedas a revelar las operaciones de más de US$10.000, fue el resultado de un compromiso entre la Casa Blanca y el senador Rob Portman, principal negociador republicano. La disposición incluye partes de una medida de Portman, según una persona familiarizada con el asunto. La Casa Blanca también ha propuesto ideas similares en los últimos meses.
“En lugar de apresurarnos a través de una disposición no probada con vastas consecuencias imprevistas, alentamos al Congreso a trabajar con la industria para encontrar un lenguaje que funcione para todas las partes interesadas”, dijo Kristin Smith, quien dirige la Blockchain Association, una asociación gremial con sede en Washington.
El plan aborda un desafío clave para el Gobierno federal: mantenerse al día con la explosión de las criptomonedas, tanto en cantidad como en valor, que permiten a los titulares eludir el sistema bancario tradicional y permanecer en gran medida en el anonimato. El valor del mercado supera este año los US$2 billones.
El Comisionado del IRS, Chuck Rettig, ha dicho que la evasión fiscal de las monedas virtuales es un factor clave para el creciente déficit fiscal, la diferencia entre lo que se debe y lo que la agencia realmente recauda. El uso de las criptomonedas también se ha relacionado con actividades ilegales, como el tráfico de drogas y el lavado de dinero.
Las criptomonedas han evolucionado mucho más rápido de lo que el Gobierno ha sido capaz de aprobar leyes para regularlas, lo que genera una preocupación pocas veces compartida tanto por republicanos como demócratas, que en gran medida discrepan sobre cuestiones fiscales.
De mutuo acuerdo
Eso hizo que la recaudación de impuestos adicional en el área fuera de mutuo acuerdo, incluso después de que los legisladores decidieron recortar una propuesta anterior en el plan de infraestructura para una expansión más amplia de las auditorías del IRS. Los republicanos consideraron que esa idea era demasiado amplia.
Al mismo tiempo, los inversionistas en criptomonedas llevan años frustrados por la falta de normas del Gobierno federal sobre cómo informar sus tenencias a efectos fiscales. En lugar de tener más claridad sobre cómo seguir las reglas, se han enfrentado a un aumento de las auditorías y la actividad de aplicación de la ley.
“Todo el mundo ha estado hablando sobre la forma adecuada de proporcionar más información en particular y que eso conduce a un mejor cumplimiento”, dijo Portman a los periodistas el miércoles después de que se anunció el acuerdo.
Sin embargo, la industria de las criptomonedas planteó dudas acerca de si la estimación de ingresos de US$28.000 millones —del contador oficial de impuestos del Congreso, el Comité Conjunto de Impuestos— era exacta.
“Ciertamente, existe un espectro que va desde la ausencia de informes y la evasión intencional, hasta los errores genuinos, y la mayoría de la gente cae más en los errores genuinos”, señaló Guinevere Moore, un litigante tributario que representa a clientes que invierten en criptomonedas.
Algunos grupos de presión de la industria de las criptomonedas consideraron que las versiones del texto del borrador del proyecto de ley eran inviables y potencialmente perjudiciales para el crecimiento de la industria en EE.UU. Dijeron que recopilar información completa será difícil, si no imposible.
Dudas de cumplimiento
Los senadores que redactan el proyecto de ley aún tienen que publicar un borrador final de la legislación.
Es una tradición de larga data que las industrias se quejen de más regulaciones y supervisión, pero el Congreso también tiene un historial de apresurar ideas fiscales inacabadas en la legislación cuando necesita los ingresos de la propuesta para compensar otros gastos en un determinado proyecto de ley.
En 2015, el Congreso aprobó un nuevo proceso de auditoría para las sociedades y empresas de responsabilidad limitada porque aumentaría la recaudación para financiar un acuerdo presupuestario, a pesar de que el legislador que desarrolló la idea dijo que aún tenía problemas técnicos.
Algunas empresas del sector de las criptomonedas dijeron que no está claro si tienen siquiera la capacidad de cumplir con la propuesta y que, si se implementa, podría empujar a parte del sector al extranjero.