:format(jpeg)/www.elespectador.comhttp://thumbor-prod-us-east-1.photo.aws.arc.pub/NbdRzmY-wSh-NDAMffI0VtOCIQU=/arc-anglerfish-arc2-prod-elespectador/public/Y7SCYHSRPBBTBDFAK4QL5N2KRM.jpg)
Las autoridades de Santiago de Chile, declarada hoy en situación de preemergencia ambiental por la mala calidad del aire, recomendaron a sus habitantes abstenerse de preparar asados, pese a la efervescencia existente por el partido entre la selección nacional y España en el Mundial de Fútbol.
"Que la gente tenga conciencia", clamó Claudio Orrego, el intendente (gobernador) de Santiago en declaraciones a Televisión Nacional (TVN) mientras fiscalizaba el cumplimiento de las medidas incluidas en la preemergencia.
"Con la calidad de vida de las personas no se juega. Hoy día tenemos mal aire y le pedimos a la ciudadanía que cumpla las normas y practique las medidas que recomendamos", añadió.
Orrego, no obstante, descartó la aplicación de multas u otros castigos a quienes insistan con los asados en esta jornada: "La persona es libre de hacer lo que quiera, yo no puedo prohibirle que fume o que haga un asado", concedió.
El partido España-Chile, a disputarse este miércoles en Río de Janeiro y vital para las aspiraciones de ambos equipos en el Mundial de Fútbol, ha puesto de cabeza a los aficionados chilenos, que tienen la mente, el alma y el corazón puestos en los jugadores dirigidos por Jorge Sampaoli y sus estómagos en la parrilla.
Para los chilenos resulta inconcebible disfrutar (o sufrir) un partido de tanta trascendencia privados de la posibilidad de degustar un asado con la familia y los amigos, con condumios y brindis dedicados a la alegría del triunfo o la agonía de la derrota, pero siempre abundantes.
Más aún con el partido de este miércoles, en que se instalarán pantallas gigantes en parques u otros espacios abiertos, en los pueden también lucir sus habilidades en la preparación de choripanes, chorizos y distintos tipos de carnes "a punto, término medio o cocida".
Un experto afirmaba hace unos días que un asado contamina el aire tanto como un autobús de la locomoción colectiva.
La preemergencia decretada para este miércoles significa, entre otras medidas, la prohibición de circular del 60 por ciento de los vehículos sin convertidor catalítico y del 20 por ciento de aquellos provistos de ese adminículo, además de la paralización de unas 1.215 industrias de Santiago.
También se prohíbe absolutamente el uso de calefactores a leña o carbón y se recomienda a los santiaguinos abstenerse de realizar actividades deportivas al aire libre y a los colegios suspender las clases de Educación Física.
El cumplimiento de las medidas, vigentes será estricto, aseguró el intendente Orrego.
Numerosas empresas han anunciado que permitirán a sus empleados retirarse al mediodía para que vean el fútbol en sus casas o darán facilidades para que sigan el partido -junto a un buen asado-, en los centros laborales.
Paradójicamente, en la mañana de este viernes la mayoría de las estaciones que miden la calidad del aire en Santiago mostraban un nivel "bueno", es decir, menos de cien microgramos de partículas nocivas por metro cúbico de aire.