Lo que acaba de informar un grupo de científicos en un estudio publicado en la revista Communications Biology, del grupo Nature, es muy preocupante: tras hacer un análisis de las poblaciones de elefantes marinos del sur en Georgia del Sur, a unos 1.500 kilómetros de la Antártida, encontraron que el 47% de las hembras reproductoras desapareció entre 2022 y 2024.
Como lo señalan en su investigación, publicada el 13 de noviembre, esta especie, que conocen con el nombre científico de Mirounga leonina, ha sufrido una pérdida sin precedentes. ¿La razón? La gripe aviar o influenza H5N1.
Desde que este virus llegó a esa remota isla a finales de 2023 ha causado serios estragos que, como indican en el artículo, representan una cifra de una magnitud que jamás se había visto: aproximadamente 53.000 hembras han muerto.
(Lea Cada día se construyen cerca de 4 kilómetros de vías ilegales en la Amazonia colombiana)
“La magnitud de este declive es verdaderamente alarmante. En años normales, podríamos observar variaciones de entre el 3 y el 7 % interanuales, pero la ausencia de casi la mitad de la población reproductora no tiene precedentes. Esto representa aproximadamente 53.000 hembras desaparecidas en toda la población del sur de Georgia”, señaló, a través de un comunicado, Connor Bamford, el autor principal del estudio.
De hecho, los investigadores hallaron que en algunas colonias hay descensos superiores al 60% en la población de hembras reproductoras. Como explicó Bamford, este brote tendrá repercusiones en el futuro, que se sentirán “durante muchos años”.
(Lea Más de 1.600 lobistas de combustibles fósiles están la COP30 de cambio climático)
“Lo que resulta particularmente preocupante es que los elefantes marinos del sur son animales longevos. Incluso las disminuciones a corto plazo en la tasa de reproducción o la mortalidad en la población reproductora tendrán impactos a largo plazo en la estabilidad de la población”, expresó en el comunicado.
Para llevar a cabo esa investigación, el equipo de científicos, entre los que se encuentran Nathan Fenney, Jamie Coleman y Cameron Fox-Clarke, del British Antarctic Survey, uso drones, los cuales les permitieron crear mapas precisos. Con las imágenes y datos que les arrojaron, pudieron hacer un conteo del número de individuos, una tarea que antes debían hacer a pie.
“Gracias a esta tecnología, pudimos censar tres de las mayores colonias de elefantes marinos del mundo en cuestión de minutos. Antes hacíamos este censo a pie, así que los drones nos permiten contar grandes poblaciones de animales rápidamente. Entre la lluvia, la nieve y los vientos huracanados, pudimos recopilar datos cruciales que nos ayudarán a comprender cómo el cambio climático afecta a estos increíbles animales”, señaló, por su parte, Jamie Coleman.
El brote de gripe aviar no solo ha causado una gran preocupación entre quienes investigan fauna silvestre. También ha causado gran inquietud a las autoridades sanitarias y agropecuarias, pues ha tenido un gran impacto en aves de corral. Solo por mencionar una cifra, en febrero de este año tuvieron que ser sacrificadas más de 11 millones de estas aves para evitar su contagio y contener el brote. La lucha contra el virus, ha reiterado la FAO, requiere una respuesta coordinada a nivel mundial.
🌳 📄 ¿Quieres conocer las últimas noticias sobre el ambiente? Te invitamos a verlas en El Espectador. 🐝🦜