El cambio climático, la degradación ecológica, las poblaciones migratorias, los conflictos, las desigualdades generalizadas y las prácticas comerciales depredadoras amenazan la salud y el futuro de los niños en todos los países.
En 2015, los países del mundo acordaron los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), sin embargo, casi 5 años después, pocos países han registrado mucho progreso hacia su consecución. Esta Comisión presenta el caso para colocar a los niños, de 0 a 18 años, en el centro de los ODS: en el corazón del concepto de sostenibilidad y nuestro esfuerzo humano compartido. Los gobiernos deben aprovechar coaliciones en todos los sectores para superar las presiones ecológicas y comerciales para garantizar que los niños reciban sus derechos y derechos ahora y un planeta habitable en los años venideros.
Por eso, 40 investigadores de UNICEF publicaron un editorial en la revista médica con estas advertencias. "La evidencia es clara: las inversiones tempranas en salud, educación y desarrollo de los niños tienen beneficios que se combinan a lo largo de la vida del niño, para sus futuros hijos y para la sociedad en general. Las sociedades exitosas invierten en sus hijos y protegen sus derechos, como es evidente en los países que han obtenido buenos resultados en materia de salud y medidas económicas durante las últimas décadas. Sin embargo, muchos políticos aún no priorizan la inversión en niños, ni lo ven como la base para mejoras sociales más amplias. Incluso en los países ricos, muchos niños pasan hambre o viven en condiciones de pobreza absoluta, especialmente los que pertenecen a grupos sociales marginados, incluidas las poblaciones indígenas y las minorías étnicas".
Según Unicef, millones de niños viven actualmente en zonas muy expuestas a los efectos del cambio climático. Más de 500 millones se sitúan en lugares muy propensos a sufrir inundaciones y alrededor de 160 millones viven en países donde las sequías son cada vez más habituales.
Los investigadores agreganlos resultados de un análisis realizado por el comité de los Objetivos de Desarrollo Sostenible que sugiere que por cada persona en el mundo se invierten 195 dólares menos de lo que se debería para cubrir la brecha de desigualdad que afecta, sobre todo, a los niños y niñas del mundo.
"Estos países se aseguran de que los niños crezcan en entornos seguros y saludables, con agua y aire limpios y espacios seguros para jugar. Respetan la igualdad de derechos de niñas, niños y personas con identidades de género no binarias".
Los investigadores proponen que los gobiernos empiecen a medir cómo el cambio climático afecta a niños y niñas, y que adopten políticas para evitar los efectos nocivos de los gases de efecto invernadero.