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Yaneth Mantilla, directora del Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) confirmó que el deprimido de la calle 94 no se entregará este año. Esta nueva demora se suma a las ocho suspensiones y tres prórrogas que ha tenido el proyecto desde que comenzó en 2005. Pero esa intersección a desnivel es solo una de las 13 obras por valorización, que la ciudadanía ya pagó y el Distrito sigue sin entregar. Todas están marcadas por retrasos heredados de pasadas administraciones. Incluso una de ellas, la de la calle 45 entre carreras séptima y quinta, se planeó en 1995 y no ha empezado.
Terminarlas no es tarea sencilla. Algunas están suspendidas y otras apenas están en la actualización de diseños. Pero el obstáculo mayor es que esas obras, que cuestan casi $1 billón, están desfinanciadas, al menos en $307.000 millones, que tendrá que poner el Distrito.
Según el cronograma del IDU, de ese grupo, la primera obra que esperan entregar es la avenida La Sirena, entre las carreras séptima y novena, que está en un 59% y estaría lista en noviembre. Las últimas se entregarían en diciembre de 2019, justo antes de que el alcalde Peñalosa abandone el Palacio Liévano. Estas serían la intersección de la Avenida El Rincón, por la Avenida Boyacá, y los tramos faltantes de la Avenida Mariscal Sucre, desde la calle 13 hasta la 19.
El plan de esta administración es ir entregando poco a poco los proyectos y así poder tramitar ante el Concejo un nuevo cobro por valorización, para financiar algunos de los proyectos de su ambicioso plan de infraestructura vial y de espacio público. Lo claro es que no sería sencillo hacer nuevos cobros a la ciudadanía cuando las obras ya pagadas están en veremos. Les presentamos el cronograma de entrega que tiene el IDU para estas obras por valorización.
