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La noche del martes se reportó un nuevo caso de sicariato en vía pública de la capital del país. En esta ocasión los hechos se reportaron en la localidad de Suba, puntualmente en el barrio Prado Veraniego, donde un sujeto que se movilizaba en bicicleta asesinó a una mujer que iba llegando a su casa.
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¿Cómo sucedió?
Según señalaron las autoridades, pasadas las 10:30 p.m, el victimario interceptó a la mujer luego de seguirla varias cuadras y, aprovechando la poca afluencia de transeúntes a esa hora, sacó un arma de fuego y disparó a quemarropa en varias oportunidades. Acto seguido, tomó la bicicleta en la que se movilizaba y emprendió la huida.
Entre tanto, vecinos de la zona que escucharon los disparos, se acercaron e intentaron, en vano, prestarle los primeros auxilios a la víctima. Sin embargo, por la gravedad de las heridas, la mujer falleció en el sitio del ataque minutos después.
“Lamentamos un hecho ocurrido en la localidad de Suba, donde una ciudadana iba al parecer a su lugar de residencia. Lo aborda un ciudadano en una bicicleta. Este, al parecer, lesiona con arma de fuego a la altura de la cabeza. Inmediatamente, esta fallece en el lugar de los hechos”, señaló, Gerly Mesa, oficial de guarnición de la Policía Metropolitana de Bogotá, en entrevista con City Tv.
“La Policía Nacional está con labores investigativas para lograr esclarecer los móviles de este hecho. Invitamos a toda la ciudadanía de la Metropolitana de Bogotá para que denuncie estos hechos que afectan la seguridad y convivencia de nuestros capitalinos”, añadió Mesa.
Por ahora se desconocen las razones que propiciaron el crimen. Las autoridades se encuentran recopilando material probatorio que les ayude a identificar la ruta de escape que tomó el sicario y establecer si la mujer asesinada era víctima de amenazas.
Violencia en Bogotá
Los delitos que generan más impacto entre los capitalinos registraron un aumento importante en 2024. Los homicidios, el hurto a personas en el transporte público, la extorsión y el uso de armas de fuego, según se denunció desde el Concejo, se instalaron en la cotidianidad de la ciudad y son el obstáculo que no ha dejado cumplir la promesa de campaña y de gobierno de la administración actual: que Bogotá camine segura.
El uso de armas de fuego también es otro lío grande, que no se ha podido resolver. Los delitos en los que se usan se cuentan por miles: atracos callejeros, robos en el transporte público (urbano e intermunicipal), hurtos en viviendas y casos de sicariatos son algunos de los más frecuentes.
En consecuencia, el 2024 fue uno de los más violentos en los últimos años. De acuerdo con la Secretaría de Seguridad, 1.204 personas fueron asesinadas, cifra que representa un aumento del 11,1%, frente a los 1.084 casos de 2023. La incidencia de los homicidios fue tal, que solamente en siete de las 20 localidades de la capital se lograron reducir los índices.
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Por Redacción Bogotá
