Sobre la mesa de La Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) reposa una nueva solicitud para emitir el licenciamiento ambiental que permita destrabar la ampliación de la Autopista Norte, entre las calles 191 y 245.
Tras una primera negativa, aludiendo vacíos ambientales en la formulación del proyecto, el concesionario Accesos Norte II radicó una nueva solicitud, recopilando los comentarios hechos en el primer momento, que deberá ser resuelta en diciembre de este año.
Un mes después de la respuesta definitiva, el Ministerio de Ambiente informó que se realizará una Audiencia Pública Ambiental para discutir la conveniencia de otorgar la licencia ambiental al proyecto. El evento se llevará a cabo el 29 de noviembre de 2025 en la Escuela Colombiana de Ingeniería Julio Garavito (Autonorte #205-59), con transmisión en vivo por los canales digitales de la entidad.
Información relacionada: Ampliación de la autonorte: elevar el tramo para corregir los viejos errores.
Este espacio, convocado por solicitud de la congresita Etna Támara Argote busca que comunidades, organizaciones sociales y entidades públicas conozcan de primera mano la solicitud de licencia ambiental presentada por la concesionaria y participen con preguntas, observaciones y documentos que deberán ser considerados en la decisión final. Antes de la audiencia, la ANLA programó una reunión informativa para el 8 de noviembre, en el mismo lugar.
Vale la pena resultar que, aunque los argumentos e intervenciones efectuadas ese día deberán ser tenidas en cuenta por la mesa técnica de la ANLA que decidirá el futuro de la licencia, la audiencia no tiene un carácter decisorio.
El anuncio ocurre en medio de la expectativa ciudadana sobre el futuro de la obra, adjudicada en 2022 y cuyo inicio se ha aplazado por la falta de licencia ambiental. En enero de 2024, la ANLA archivó la primera solicitud por deficiencias técnicas en la conectividad hídrica y ecosistémica con los humedales Torca y Guaymaral. La concesionaria debió rehacer y complementar los estudios, que fueron radicados nuevamente en 2025.
Según datos oficiales, el proyecto contempla duplicar el corredor de 3 a 6 carriles por sentido, incluir ciclorrutas y andenes de tres metros, y habilitar un carril exclusivo para TransMilenio. La inversión estimada asciende a 1,8 billones de pesos.
Más allá de las cifras, expertos y ambientalistas insisten en que el punto crítico está en corregir los “errores históricos” de la vía. El tramo actual fue construido sobre zonas de humedal, lo que en episodios de lluvia intensa ha causado inundaciones y colapsos parciales.
Una de las propuestas técnicas es elevar partes de la autopista hasta 4,4 metros para mejorar la conectividad hidráulica y permitir pasos de fauna, medida que se discutirá durante la audiencia.
Mientras que el concesionario defiende una ampliación fraccionada utilizando estructuras box culvert, sectores ambientalistas y afines al gobierno argumentan la necesidad de un viaducto, totalmente elevado, para reconectar los dos humedales separados durante la construcción original de la autopista.
La ANLA tendrá la última palabra sobre la licencia. Si el concepto es favorable, las obras podrían arrancar a comienzos de 2026, aunque todo dependerá de lo que ocurra en la audiencia y de la evaluación posterior de los estudios ambientales.
Le puede interesar: Transmilenio anunció el cierre de algunas estaciones el próximo 12 de octubre.
Para conocer más noticias de la capital y Cundinamarca, visite la sección Bogotá de El Espectador.