Cayó el “Clan Azul”, una de las principales redes de microtráfico del barrio San Bernardo

Los miembros de la banda operaban bajo el control de "Los Venecos", uno de los grupos que controla la criminalidad del sector. Vendían bazuco y marihuana valiéndose de menores de edad y personas en situación de calle. Siete de los capturados fueron enviados a prisión y una persona fue beneficiada con prisión domiciliaria.

Foto: Secretaría de Segurida

Para hacerle frente a la situación de criminalidad, atentados y homicidios que actualmente se vive en el barrio San Bernardo, en la localidad de los Mártires, en las últimas semanas las autoridades redoblaron los esfuerzos en materia de inteligencia y presencia institucional para mitigar la crisis y retornarles la tranquilidad a los residentes del sector.

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En medio de esas labores, el pasado 28 de marzo, las autoridades realizaron un operativo en el sector que derivó en la desarticulación y la captura de ocho integrantes del “Clan Azul”, banda señalada como una de las principales redes de venta y distribución de narcóticos en el sector, la cual, además, instrumentalizaba menores y personas en distintas condiciones de vulnerabilidad para distribuir sustancias sin levantar la sospecha de las autoridades. Este grupo, resalta la Policía, trabajaba bajo el mando del “Los Venecos”, uno de los grupos criminales que se disputa, a sangre y fuego, este complejo sector del centro de la ciudad.

La investigación, liderada por la Fiscalía y la Policía de Bogotá, que se extendió durante 10 meses, permitió identificar que los hoy capturados están involucrados en la venta de marihuana y bazuco en el sector de San Bernardo, puntualmente en la calle 1 y la calle 3 entre las carreras 10 y 14, puntos neurálgicos de orden público y criminalidad en donde, además, se han reportado los atentados con granadas de las últimas semanas.

La banda se encargaba de evitar hurtos y otros hechos de inseguridad en la zona para evitar llamar la atención de las autoridades.

Los hoy capturados tenían como fachada la actividad del reciclaje, de la cual se valían para ocultar, transportar y distribuir la droga en carretillas o camuflada entre los residuos que recogían en la zona, de esa manera lograban evadir la mayoría de los controles policiales.

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Los capturados

Entre los miembros de la banda capturados figura alias ‘Wilson’, cabecilla de la organización y encargado de la compra de los estupefacientes, el almacenamiento y la distribución de los roles de los demás implicados (administradores y expendedores).

Por su parte, alias “Segovia”, quien cumplía el rol de administrador, ya había sido capturado portando un arma de fuego y estaría vinculado en el homicidio de una persona en el municipio de los Andes (Antioquia) en el año 2014, al parecer por el control del tráfico de estupefacientes en el lugar.

Por otro lado, alias “Olga”, pareja sentimental de “Segovia” quien cumplía el rol de expendedora, reclutó a su sobrina, de 17 años, y le encomendó la misión de comercializar las sustancias estupefacientes en los referidos sectores del barrio San Bernardo. “El rol de expendedores lo realizaban, además, alias ‘El Gordo’, ‘Lizeth’ y ‘Olga’, quienes se acercaban a los habitantes en condición de calle para persuadirlos de ocultar los estupefacientes, impulsando su venta al menudeo”, confirmó la Mebog.

Así las cosas, con ese material probatorio entre manos, las autoridades realizaron siete diligencias de allanamiento en las localidades de Ciudad Bolívar, Kennedy y Santa Fe. Más de 4.000 dosis de estupefacientes listas para ser vendidas en las calles del centro de la ciudad fueron incautadas, además de dinero en efectivo y celulares que usaban para concretar los negocios criminales. Se estima que las actividades ilegales de la banda representaban unos $120 millones al mes.

Por otro lado, la Policía confirmó que las personas capturadas registran antecedentes por homicidio, tráfico de estupefacientes, concierto para delinquir, porte ilegal de armas de fuego y hurto calificado y agravado. Tras este último golpe tendrán que responder por los delitos de tráfico de estupefacientes, uso de menores de edad y concierto para delinquir.

Un juez de la República envió a siete de los implicados a un centro carcelario y le otorgó detención domiciliaria a otro de los implicados.

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