Luego de que el concejal William Moreno, promotor del apagón de celulares Claro, denunciara una supuesta campaña de intimidación contra los ciudadanos que firmaron una carta en busca de que se mejore el servicio y se pague la deuda por más de 140 mil millones de pesos a la Empresa de Telecomunicaciones de Bogotá (ETB), la multinacional rechazó las acusaciones.
“Las llamadas a los firmantes de una carta radicada recientemente en un Centro de Atención y Servicio son parte del proceso mismo de seguimiento, Atención y Servicio al Cliente que se realiza ante cada una de las preguntas, quejas o reclamos que puedan tener los usuarios y que son conocidas oficialmente por la compañía”, puntualizó un comunicado oficial de Claro.
La empresa de telefonía móvil agregó: “rechazamos las acusaciones que señalan que estamos intimidando a los firmantes de una carta radicada en días pasados ante la compañía, en la que entre otros, se señalaban algunas quejas sobre el servicio de la compañía”.
Por el contrario, señala el comunicado, “en aras de ofrecer un buen servicio a los usuarios, y cumpliendo los procesos administrativos y legales señalados para estos casos, la compañía contactó directamente a los firmantes para ofrecer solución a la inconformidad planteada por cada uno de ellos”.
Agregaron que es importante resaltar que cualquier tipo de queja, pregunta o reclamo que recibe la compañía es revisado de manera minuciosa con el fin de brindar una solución oportuna a sus clientes.