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Antes de finalizar el 2025, quienes se movilicen en automóviles, motocicletas, patinetas o bicicletas eléctricas en el departamento de Cundinamarca, contarán con tres estaciones de carga, conocidas como electrolineras, que se instalarán en tres municipios del departamento y cuyo uso será de carácter gratuito.
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La noticia fue confirmada por la Corporación Autónoma Regional CAR, entidad que señaló que las estaciones estarán ubicadas en tres de sus sedes ubicadas en los municipios de Zipaquirá, Cogua y Sopó. La entidad señaló, además, que las estaciones en mención son las primeras de las 8 que se esperan habilitar durante el cuatrienio.
Así funcionarán las estaciones
La primera ‘electrolinera’ funcionará en la sede administrativa de la Regional Sabana Centro de la CAR ubicada en el barrio Algarra del municipio de Zipaquirá, la segunda, en el Parque Puente Sopó, ubicado en el municipio del mismo nombre y la tercera en el Parque Embalse del Neusa, en Cogua, de manera que se cumpla el doble propósito de motivar el conocimiento y disfrute de los espacios recreativos de la entidad y la opción de cargar sus sistemas de transporte sostenibles.
Se espera que estos 3 primeros puntos de Carga Vehicular Fotovoltaica.- CVF, alimentados por paneles solares, contribuyan a reducir el consumo de energías convencionales, generando ahorro a largo plazo y disminuyendo la dependencia de energías fósiles, al tiempo que contribuirán a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y a la adaptación al cambio climático.
“Serán las primeras electrolineras del país que funcionarán con energía solar o fotovoltaica, porque ese es el modelo al cual queremos que lleguen las empresas e instituciones en Colombia y desde luego, los ciudadanos tenemos que transformar nuestros sistemas de movilidad, abandonando el Diesel y la gasolina y empezar a movernos con energía eléctrica”, subrayó el director de la CAR, Alfred Ballesteros.
Se espera, además, que la iniciativa, cuya primera fase representa una inversión de más de 1.600 millones de pesos, se entienda como una contribución a la transición hacia modelos de energía limpia que beneficiará a más de 200 mil habitantes de Zipaquirá y Sopó y a las más de 150 mil personas que cada año visitan los parques Neusa y Puente Sopó.
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Por Redacción Bogotá
