Invasiones, un parqueadero de carros y hasta un botadero irregular de basuras. Ese es parte del panorama con el que se encuentran quienes visitan el humedal de La Vaca, en el suroccidente de Bogotá. Ante ello, la administración distrital –en cabeza de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado– puso en marcha la primera etapa de su restauración, orientada a la recuperación de al menos dos hectáreas de su costado sur, donde se registran las mayores problemáticas. (Lea: Las dos caras del humedal La Vaca: la triste, en Vaca Sur)
Los trabajos iniciaron un cerramiento provisional, jornadas de limpieza y una estrategia de educación ambiental. El propósito, explica Germán González Reyes, gerente de la entidad, es reivindicar estos ecosistemas como espacios estratégicos y vitales para el medio ambiente de la ciudad. Aún más si se tiene en cuenta que de las cerca de 150 mil hectáreas de estos espacios en la sabana de Bogotá, hoy solo sobreviven alrededor de 1.500 hectáreas.
“Lo que estamos haciendo con el Acueducto y varias entidades del Distrito es empezar a intervenir para recuperar este humedal. Son cerca de 2,3 hectáreas que se volvieron un botadero de basura, una invasión de terrenos por parte de gente que ha puesto parqueaderos, que cobra por el servicio. Vamos a intervenir este terreno para recuperarlo y ojalá en unos años veamos nuevamente el agua que existía acá”, dijo González.
Superada la primera etapa, el paso a seguir será la gestión predial para la recuperación de los predios faltantes y finalmente, proceder al cerramiento total del lote. “El abandono al que estuvo sometido este humedal derivó en la pérdida total de su espejo de agua, y la desaparición de la fauna y la flora típica de estos ecosistemas hídricos”, agregó el gerente del Acueducto.
La administración detalló que los actuales terrenos del humedal La Vaca conformaban hace 40 años el gran humedal Chucua de Timiza, una zona que fue invadida casi en su totalidad y terminó por partir el ecosistema en dos: La Vaca Norte y La Vaca Sur.
La estrategia de recuperación cuenta con el apoyo de la Secretaría Distrital de Ambiente, Fuerzas Militares, Secretaría de Gobierno y la Alcaldía local de Kennedy.