
Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Mientras el presidente Gustavo Petro destacó la decisión del agente interventor de la Superintendencia de Salud por ordenar la terminación del contrato entre la Subred Centro Oriente del Distrito Capital y la empresa española Copasa (que había concretado la demolición y reconstrucción de una parte del complejo hospitalario, San Juan de Dios), el alcalde, Carlos Fernando Galán, se mostró visiblemente molesto por la decisión, por medio de un video publicado en su cuenta de X.
“En Bogotá somos respetuosos de las competencias de la Nación, pero nuevamente vemos con extrema preocupación alguna de las decisiones del Gobierno Nacional sobre Bogotá”, manifestó el primer mandatario, recordando la intervención de la Subred Centro Oriente en mayo de 2024, según la SuperSalud por insuficiencias administrativas, asistenciales y financieras.
Ante la terminación del contrato que quedó ratificada en la Resolución 646 del 16 de agosto de este año, el alcalde Galán aseguró que “esta decisión no protege la salud de los bogotanos, al contrario, pone en riesgo la prestación del servicio de salud, la estabilidad del sistema de salud e impide la recuperación del San Juan de Dios, que ha sido ordenada en varias sentencias en los últimos años”.
LEA MÁS: Quienes querían desaparecerlo no tendrán éxito: Petro sobre el San Juan de Dios
Por ello, agregó, pidió a la Contraloría General y la Procuraduría General de la Nación, “verifiquen que la decisión adoptada no atente contra la moralidad administrativa y el patrimonio público. También les pedí a las secretarías de Salud y Jurídica, evaluar las acciones administrativas y judiciales a las que haya lugar, frente a la motivación y competencia del agente interventor”.
Terminar unilateralmente el contrato con COPASA en el Hospital San Juan de Dios no es cuidar la salud de los bogotanos.
— Carlos F. Galán (@CarlosFGalan) August 22, 2024
Por el contrario, la decisión adoptada por el agente interventor designado por el Gobierno Nacional pone en riesgo la salud de millones de bogotanos, la… pic.twitter.com/YEW8Ku4Dxi
¿Qué viene tras la terminación del contrato?
La decisión de terminar el contrato que adjudicó la Subred Centro Oriente en la alcaldía de Enrique Peñalosa en 2016, por más de $460.000 millones, quedó ratificada en la Resolución 646 del 16 de agosto de este año. El documento está firmado por Luis Galvez, quien es el agente interventor de la Superintendencia de Salud, entidad nacional que desde mayo del 2024 tiene intervenida la Subred Centro Oriente.
La resolución determina: “dar por terminado unilateralmente el contrato 02-bs-008-2020, suscrito entre la Subred Integrada de Servicios de Salud Centro Oriente, empresa social del estado y la sociedad anónima de obras y servicios Copasa, sucursal Colombia, cuyo objeto es contrato de obra para el diseño, construcción, dotación, puesta en marcha y operación de la nueva Uhmes (Unidad Médica Hospitalaria Especializada en Salud) Santa Slara y CPAS Conjunto Hospitalario San Juan de Dios, cuyo plazo de ejecución es ciento ocho (108) meses contados a partir de la suscripción del acta de inicio (firmada en la administración de Claudia López)”, indica el documento.
Pero la terminación del contrato no termina de resolver el millonario pleito en el que está el Distrito al adjudicar esta obra que no pudo hacerse por varias razones, entre ellas, el interés del presidente Gustavo Petro en el hospital desde que era alcalde de Bogotá. De hecho, Petro, en su alcaldía, fue quien le compró a la Gobernación de Cundinamarca el complejo para restaurarlo y volverlo a revivir tras años de abandono, pero cuando llegó Peñalosa al palacio Liévano, este cambió el plan del hoy presidente de renovarlo y planteó el proyecto de demolición y construcción de una nueva torre, obra que adjudicó a Copasa.
Le puede interesar: Sujeto disparó a quemarropa contra barberos en el barrio Paraíso, Ciudad Bolívar
A pesar de que Copasa presentó en el pasado al menos tres veces la solicitud al Ministerio de Cultura para demoler el hospital, no se la aprobaron. Ahora, con la llegada de Petro a la Casa de Nariño, el mandatario incluyó en su Plan de Desarrollo el mecanismo para volver a adquirir el edificio y renovarlo, pero no será fácil, pues la empresa española tiene demandado al Distrito Capital en un tribunal de arbitramento.
En su demanda arbitral, pide que condenen al Distrito a pagar una indemnización por $70.000 millones, de los cuales $30.000 millones son por costos en el proceso y $40.000 millones por las ganancias que dejaron de percibir.
No obstante, la resolución detalla que el Distrito, el 12 de enero de 2024, “presentó una demanda arbitral nacional en contra de Copasa, invocando la naturaleza nacional de conformidad con lo establecido en el pacto arbitral establecido en la sección 20.2 del Contrato y a la inexistencia de los criterios de internacionalidad del arbitraje establecidos en la ley 1563 de 2012″.
Sobre este asunto, Gerson Bermont, secretario de Salud, dijo a El Espectador: “Los terrenos del San Juan de Dios pertenecen al Fondo Financiero Distrital de Salud, no a la subred Centro Oriente. Estamos dispuestos a negociar con el gobierno nacional para la adquisición de los terrenos, pero también esperamos que nos ayuden a resolver la dificultad contractual generada por la decisión del Ministerio de Cultura de prohibir la demolición de la torre central del hospital, lo que causó una demanda por parte del contratista
Con esta resolución empieza a desenredarse el lío con el San Juan de Dios, que ahora pasaría a ser propiedad del Gobierno Nacional si logra desenvolver los líos con Copasa aspecto que tendrá que sortear con la disposición de una Secretaría de Salud intervenida.
Para conocer más noticias de la capital y Cundinamarca, visite la sección Bogotá de El Espectador.

Por Redacción Bogotá
