El plan que ha esbozado el alcalde Enrique Peñalosa, de urbanizar parte de la reserva Thomas Van der Hammen no tiene defensores en la Comisión Quinta de la Cámara de Representantes, que se ocupa de temas ambientales. Todos los congresistas intervinientes en el debate de control político sobre la reserva, que se adelantó ayer, se mostraron en contra de la propuesta.
Más allá del valor ambiental de la Van der Hammen, promulgado por el Ministerio de Ambiente en el 2000, la Corporación Autónoma Regional (CAR) en el 2011 y por más de 50 estudios académicos, se añadieron nuevas aristas al debate.
El Distrito ha justificado su plan de urbanizar la mayor parte de la reserva forestal (que cuenta con casi 1.400 hectáreas, de las cuales el 50 % está en manos de particulares, con intereses claros en urbanizar) con la proyección del crecimiento demográfico de la ciudad. Según cifras que ha presentado el alcalde Enrique Peñalosa, la ciudad tendría 3,6 millones de nuevos habitantes en el 2050, lo que genera una necesidad indiscutible, para él, de convertir la reserva en un espacio urbanizable. Esto, para contribuir a la superación del déficit de 300.000 viviendas que, asegura, tiene la ciudad.
En el salón Boyacá del Congreso, varias voces pusieron en tela de juicio esos datos, entre ellas la del representante Rubén Darío Molano (Centro Democrático), quien dijo: “Las proyecciones de Peñalosa no coinciden. Las está planteando con modelos matemáticos difíciles de sostener y para los cuales es necesario un nuevo censo”. Por su parte, María Mercedes Maldonado, exsecretaria de Hábitat y Planeación, ya había controvertido las cifras del alcalde, al señalar que a la ciudad le faltan 87.262 viviendas según la Encuesta Multipropósito de 2014. Es decir, menos de la tercera parte de lo que señala el mandatario.
Aunque el alcalde no estuvo presente para defender su proyecto, Francisco Cruz Prada, secretario de Ambiente, asumió la vocería para decir que si presentan alguna propuesta sobre la reserva, ésta será mejor, en términos ambientales, que lo establecido actualmente.
Inti Asprilla, el representante que citó el debate, puso en duda la competencia del alcalde para pedir la eventual sustracción de la reserva y sostuvo que el desestimar su valor ambiental no le compete al Distrito, sino a los propietarios. De paso, criticó el hecho de que ni la CAR ni el Ministerio de Ambiente han defendido, ante la nueva propuesta del alcalde Peñalosa, las decisiones que ya tomaron sobre la reserva.
Néstor Franco, director de la CAR, sostuvo que si llega la propuesta del Distrito de levantar la restricción para urbanizar, se evaluará como cualquier otra. “Hasta que se conozca de manera oficial la propuesta, la Corporación no puede emitir ningún juicio de fondo sobre lo que solo se ha expuesto en medios”.
Gabriel Vallejo, ministro de Medio Ambiente, señaló algo similar: “¿Qué opinamos del proyecto? ¿Cuál proyecto? ¿Qué ha pasado del 2000 a hoy que haga cambiar la reserva?”. Se sigue discutiendo el futuro de la Van der Hammen a partir de una propuesta en el aire.