Claudia Janeth Mercado asumió a principios de noviembre la dirección de la Agencia Regional de Movilidad (ARM), un órgano de articulación clave en la recién creada Región Metropolitana. Es ingeniera civil con especialización en Transporte, Tránsito y Seguridad Vial y ha liderado proyectos de movilidad en la Secretaría de Movilidad de Bogotá. En su nuevo rol, como la encargada de la ARM, tendrá la tarea de fortalecer la movilidad de la región para atraer nuevos socios y consolidar un territorio metropolitano.
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¿Cuál es la función de la Agencia Regional de Movilidad (ARM)?
La ARM nace como respuesta a los desafíos de movilidad que compartimos entre Bogotá y los municipios de la sabana. Hay problemas de congestión en los accesos, falta de conexión entre sistemas y ausencia de una autoridad que conciba el transporte más allá de los límites distritales. Nuestra tarea es planificar y coordinar esas soluciones de movilidad regional, promover el transporte sostenible y mejorar la accesibilidad entre ciudad y municipios.
¿Desde cuándo opera la agencia y cómo se financia?
La ARM fue creada en 2022, pero empezó a operar formalmente en agosto de 2024, cuando se aprobaron sus estatutos. Tiene una fuente especial de financiación establecida en la Ley 2199 de 2022: un aporte adicional de 0,2 puntos porcentuales al impuesto vehicular en Bogotá y Cundinamarca. Ese recaudo sostiene el funcionamiento de la entidad y sus proyectos de inversión.
¿Qué proyectos estratégicos lidera la ARM?
Estamos impulsando varios frentes. El primero es el corredor de la calle 80, un proyecto que busca mejorar la conectividad con Cota y descongestionar uno de los accesos más críticos de la ciudad. Firmamos un convenio con la Corporación Financiera Internacional (IFC) para realizar los estudios y diseños de prefactibilidad y factibilidad del tramo entre el portal de la 80 y la intersección de Siberia. También trabajamos en el puente de Tibanica, entre Bogotá y Soacha, una obra de COP 118.000 millones, que reducirá los tiempos de viaje por la autopista Sur y mejorará la conexión a través de la avenida Ciudad de Cali.
Uno de los temas más esperados es la tercera línea del metro de Bogotá. ¿Qué papel juega la agencia ahí?
La Agencia participa, junto a otras entidades como la empresa Metro, en los estudios de prefactibilidad y factibilidad de la tercera línea del metro, dentro de la proyección de una red ferroviaria de pasajeros para toda la región metropolitana. Este año esperamos definir el trazado definitivo, que se derivará de esos estudios técnicos. La Financiera de Desarrollo Nacional (FDN) es la encargada de la estructuración integral del proyecto, hasta llegar al trámite de cofinanciación ante el Gobierno nacional.
¿Qué opciones de trazado se están considerando?
Por ahora el equipo técnico se encuentra en fase de calibración de modelos de transporte. A partir de ese análisis se definirán los posibles trazados. Esperamos tener una propuesta consolidada antes de finalizar el año.
Además del metro, ¿Qué otras obras de transporte masivo están en marcha?
La extensión de Transmilenio fase IV en Soacha, que se conectará con la avenida Ciudad de Cali, es otro proyecto clave, que beneficiará a unos 150.000 habitantes, principalmente del sector de Ciudad Verde. Estamos en estudios de factibilidad.
¿La agencia también tiene funciones en la gestión del tránsito y el transporte regional?
Somos autoridad regional de transporte, no de tránsito. Eso significa que no imponemos comparendos ni controlamos el tráfico, pero sí articulamos las decisiones entre entidades y municipios. Desde abril de este año asumimos la competencia que tenía el Ministerio de Transporte en el corredor Soacha-Bogotá. Ya adoptamos un acuerdo que reemplaza los antiguos convenios operacionales y da certeza jurídica a transportadores y usuarios.
¿Cómo avanza la vinculación de nuevos municipios a la Región Metropolitana?
En los municipios que ya hacen parte podemos ejecutar obras; en los que no, solo estudios. La idea es que más municipios se sumen para que esos estudios se traduzcan en proyectos reales. Algunos aún tienen temores sobre perder autonomía, pero nuestra función no es sustituirlos, sino articular políticas y conectar territorios.
Desde su experiencia, ¿Cuál es el principal desafío de la movilidad regional?
La falta de planeación conjunta. Cada municipio ha tomado decisiones dentro de sus límites, sin una visión metropolitana. Necesitamos una planeación integrada de transporte y ordenamiento territorial, donde la sostenibilidad y la financiación sean ejes centrales. Ningún sistema de transporte público en el mundo es autosostenible, así que debemos pensar en instrumentos de financiamiento innovadores y en corredores realmente integrados para mejorar la calidad de vida de la gente.
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