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El pico de la pandemia sigue siendo un dolor de cabeza para la Administración y la ciudadanía en general, por lo que desde el Distrito se busca tomar medidas para prevenir el incremento desmedido de contagios.
En ese sentido, desde la Alcaldía se logró una alianza con la Universidad del Rosario, con la que se hizo un estudio que identificó diez zonas que son potencialmente dispersoras del virus, lo que llevó a tomar nuevas medidas de bioseguridad.
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Las zonas determinadas tienen una alta actividad comercial y de interacción, donde se pueden encontrar ventas informales en el espacio público, zonas de comercio como restaurantes, actividades turísticas, entre otras. Dadas estas condiciones se generan mayor contacto cercano entre personas que pueden llegar a ser transmisoras del virus.
Según Secretaría de Salud, luego de hacer análisis académicos y contrastarlos con información de caracterización, actividades de inspección, vigilancia y control, se identificó un alto riesgo en las siguientes zonas:
- Las Ferias, Engativá, Santa Cecilia de la localidad de Engativá
- El Muelle en la localidad de Fontibón
- Galerías y Teusaquillo de la localidad de Teusaquillo
- Doce de Octubre de la localidad de Barrios Unidos
- Timiza y Carvajal de la localidad de Kennedy
- Ciudad montes en la localidad de Puente Aranda
- San José en la localidad de Rafael Uribe Uribe
- El Restrepo en la localidad de Antonio Nariño
- Bosa Central en la localidad de Bosa
- Tibabuyes en la localidad de Suba
- Los Cedros en la localidad de Usaquén
Ante este panorama, desde el Distrito se decidió tomar nuevas medidas, específicamente en esta zonas identificadas, entre ellas está un incremento en la toma de muestras para Covid-19, organización del espacio público para evitar aglomeraciones, peatonalización de vías en horarios y zonas específicas, actividades de comunicación del riesgo en el transporte público, reutilización de espacios como parques que estén en la zona, implementación de zonas de lavado de manos y medidas de autocuidado para una reapertura económica segura, con el fin de reducir la transmisibilidad del coronavirus.
Hay que aclarar que, según el secretario de Salud, Alejandro Gómez, el riesgo en esas zonas no está ligado a las personas que allí viven, sino a las personas que allí tienen interacción social.
“Vamos a hacer intervención en estas zonas para que quienes conviven, interactúan o trabajan en estos sectores, sepan que están en una zona de superdispersión. Queremos seguir con el proceso de apertura, pero queremos minimizar el riesgo”, agregó Gómez.
Por último, se informó que desde la misma Universidad del Rosario y la Secretaría de Salud se harán evaluaciones periódicas para analizar el comportamiento de estas zonas y establecer si otros sectores de la ciudad con superdispersión del virus, requieren una intervención.
Por Redacción Bogotá
