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La obra de saneamiento de agua más importante de Colombia, que estuvo con una medida cautelar durante más de un año, da un gran paso hacia adelante con la decisión del Tribunal Administrativo de Cundinamarca de desenredar el lío en el que se encontraba la obra desde julio de 2023 cuando el tribunal frenó la licitación. La decisión llega en medio de incertidumbre sobre el futuro del suministro de agua en Bogotá y la región, y permite que el Acueducto siga con los procesos de licitación para arrancar lo más pronto posible las obras y así poder habilitar, para 2025, la primera estación.
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De acuerdo con la EAAB, esto es un “espaldarazo” del Trubunal y en particular, de la magistrada Nelly Yolanda Villamizar, quien ha liderado el proceso para salvar al río Bogotá e instó en esta decisión al Gobierno Nacional. Esto con el fin de dar cumplimiento a la sentencia del 28 de marzo de 2014 que ordenó a la Nación avanzar inmediatamente en esta obra que será uno de los proyectos de infraestructura más grandes del país y de América Latina, convirtiéndose en la PTAR más grande de Colombia, la tercera más grande de América Latina, y una de las quince más grandes del mundo.
Cabe recordar que la suspensión de hace un año se dio por desencuentros entre la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), que dará el 50 % del costo total de la obra -que es de $4.5 billones- y el Acueducto. Todo, porque la EAAB había reestructurado el proyecto en una fase, cuando la CAR contemplada que fuera en dos. La incertidumbre y disparidad en conceptos técnicos, llevó el lío al tribunal, congelando el proceso licitatorio.
Natasha Avendaño, gerente del Acueducto, indicó que la CAR deberá acompañar la obra como la estructuró la EAAB: “Con el levantamiento de la medida cautelar, la CAR Cundinamarca debe dar cumplimiento a los convenios ordenados en la Sentencia, lo que permitirá que los recursos sean girados al proyecto de descontaminación del río en los términos que ordena la providencia”.
¿En qué va el proceso licitatorio?
El 1 de abril, la Empresa de Alcantarillado y Acueducto cerró el plazo de recepción de solicitudes para construir la planta de tratamiento de aguas más grande de Colombia y cuya espera se había prolongado desde hace más de 20 años. Son cuatro los consorcios que se presentaron para ser elegidos para financiar, elaborar los estudios y diseños de las unidades de ejecución, la gestión social y ambiental, la puesta en marcha, la estabilización, la operación, el mantenimiento y la reversión de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales de Canoas.
China, una filial de México, y dos de España y Francia, buscan quedarse con el contrato para la construcción de la planta de tratamiento de aguas más ambiciosa del país.
Esta planta recibirá las aguas residuales de las cuencas Fucha, Tunjuelo, Tintal y del casco urbano del Municipio de Soacha, transportadas por los interceptores Fucha-Tunjuelo, Tunjuelo-Canoas y elevadas por la Estación de bombeo de Canoas, lo cual representa el 70% de las aguas residuales producidas por la ciudad.
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Por Redacción Bogotá
