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Basta movilizarse a 50 kilómetros por hora. Esa velocidad, en caso de atropellar a un peatón, es suficiente para que la probabilidad de que la víctima muera sea de cerca del 80%. Este es uno de los tantos datos que ejemplifica los riesgos de exceder la velocidad al volante. Bogotá no está ajena a esta problemática: según un estudio de la universidad Johns Hopkins de Estados Unidos, en la capital del país uno de cada cuatro conductores (el 24%) rebasa los límites de velocidad.
De acuerdo con la Secretaría Distrital de Movilidad, la Avenida Boyacá, seguida de la Avenida Carrera 68, es el corredor donde mayor cantidad de vehículos se presentan circulando a más de 60 kilómetros por hora. A esa velocidad, atropellar a un peatón sería equiparable a empujar a una persona desde un piso sexto de un edificio.
Incluso, se estima que la mayoría de fallecidos y heridos menores de edad que han dejado los siniestros viales en Bogotá se han concentrado en vías arteriales como la Avenida Boyacá. El punto con mayor concentración de niños fallecidos y lesionados es la Avenida Boyacá con calle 72. La franja entre 10:00 de la noche y 5:59 de la mañana es en la que se registran también los mayores excesos de velocidad.
Por todo esto, la administración lanzó este jueves una estrategia para concientizar a los conductores sobre el riesgo de manejar con exceso de velocidad. La iniciativa, denominada ‘Bájale a la velocidad’, pretende ilustrar los peligros de sobrepasarse al volante. Para ello, se le apuesta no solo a la comunicación sino a un refuerzo en el control policial.
“El exceso de velocidad es una de las causas de los siniestros de tránsito graves. Hoy lanzamos una campaña con la Iniciativa Bloomberg para reducir el exceso de velocidad en Bogotá y evitar más pérdidas de vidas en nuestras calles. Nuestra convicción es que no es normal que la gente muera cuando está movilizándose en las calles, sino que es algo crítico que debemos cambiar, y que realmente nos debe indignar”, aseguró el secretario de Movilidad, Juan Pablo Bocarejo.
El Distrito recordó otras medidas que ha puesto en marcha para lograr reducir la tasa de accidentalidad en la ciudad, entre ellas cambios y demarcación de calles e intersecciones; estrategias para impulsar la seguridad de los motociclistas; control policial al exceso de velocidad y embriaguez, sumado a campañas de cultura ciudadana.