Yefer Vega, otro concejal de Bogotá que sale del anonimato por una salida en falso

En un video de la Alcaldía de Bogotá, el cabildante de Cambio Radical tachó de drogadictos a los detractores de Peñalosa. "Les quitamos a su jíbaro", afirmó Vega, antes de que se le viniera encima una avalancha de indignados por sus palabras.

Redacción Bogotá
29 de noviembre de 2016 - 03:33 a. m.
Yefer Vega.
Yefer Vega.

Reunir los nombres de concejales de Bogotá o congresistas de Colombia que salen del anonimato no por sus iniciativas o sus debates de control político, sino por comentarios desafortunados, podría resultar en un kilométrico papel. El último en unirse a esa curiosa lista es Yefer Vega, un primíparo en el Concejo de Bogotá, pero quien llegó a la corporación pisando fuerte con una altísima votación de 23.926 personas. ¿Su bandera? “Trabajar por una Bogotá educada, habitable e inteligente”, como dijo a El Espectador en septiembre de 2015, cuando hacía campaña para su llegada al Cabildo. Pero no fue eso lo que, por primera vez, lo hizo tendencia en Twitter y le valió para tener cientos de menciones. (Lea la entrevista a Vega en #ElCandidatoResponde)

Pese a las credenciales con que llegó (también fue el cabildante más votado de su partido, Cambio Radical, de la bancada peñalosista en el Concejo), Vega fue para el programa “Bogotá Cómo Vamos” el número 33 de 45 según las funciones desempeñadas. Por esa poca actividad en la corporación, a muchos internautas los sorprendió un video de la Alcaldía de Bogotá, protagonizado por el cabildante de Cambio Radical, en el que habla de la recuperación del Bronx, quizá el golpe de autoridad más fuerte que ha dado la Administración Distrital en estos primeros 11 meses de gestión. (Lea: ¿Qué dejó la intervención del Bronx después de seis meses?)

Pero que el video institucional fuera protagonizado por un concejal era lo de menos. Lo que indignó a cientos de usuarios de Twitter fueron las palabras que usó Vega para referirse a quienes están hablando desde junio de una posible revocatoria al alcalde Enrique Peñalosa, que comenzaría a tomar forma en pocas semanas. En pocas palabras, Vega calificó de drogadictos a un 69 % de bogotanos que, según la más reciente encuesta Gallup sobre la percepción de los ciudadanos frente a sus alcaldes, desaprueba la gestión del candidato que prometió recuperar la ciudad.

“Creo que estas personas que están pidiendo revocatorias, son las que están ausentes y con ese gran dolor porque les quitamos a su jíbaro.  A estas personas hoy les recomiendo que dejen trabajar a Enrique Peñalosa y que más bien sumemos todos nuestros esfuerzos para construir y recuperar nuestra ciudad”, dijo Vega durante su video, echando así al traste su argumentada defensa a la toma del Bronx que ya cumple seis meses, en la que habló de los crímenes que allí se cometían y las múltiples violaciones a los derechos humanos en esas cuadras de decadencia y muerte.

Como era de esperarse, los señalamientos no cayeron bien en los políticos, académicos, abogados, investigadores y grupos sociales que están planteándose iniciar desde enero las acciones para revocar el mandato de Peñalosa. Como era de esperarse, todo lo que dijo antes de esa afirmación poco importó y el centro del video, que pretendía defender la toma del Bronx, fueron sus palabras contra los contradictores de la actual administración.

Muchos le recordaron a Vega que en el hecho no fue capturado ninguno de los verdaderos capos del Bronx, los dueños y amos de las acciones de la olla. Otros, le exigieron respeto por calificarlos de drogadictos. Un tercer grupo de opiniones contra el video se refería al “cambio de sede” que hubo, pues los alrededores del Bronx son hoy unas pequeñas ollas en las que habitan miles de habitantes de calle, y continúa el expendio de droga, tal como en esa ya extinta cuadra en forma de L.

Así, el concejal salió del anonimato en el que gran parte de la opinión pública lo tenía, quizá por ignorancia o por su poco seguimiento a la gestión de Vega, aunque, según el informe de Bogotá Cómo Vamos, no es mucho lo que habría que seguir: el indicador del control político que ha hecho es de 24.3 sobre 45; su actividad normativa es de 12.4 sobre 30; su asistencia a las sesiones es de 9.1 sobre 15 y su participación es de 7.4 sobre 10, siendo los dos únicos campos en que no queda tan mal parado. De hecho, en los más de 600 trinos que ha hecho la cuenta del Concejo de Bogotá este mes, solo en 4 se menciona algo relacionado a las propuestas y actividad del cabildante.

La postura de Vega también contrasta lo que pensaba durante su campaña sobre la atención a drogodependientes. Para el concejal en el ojo del huracán, los Centros de Atención Médica a Drogadictos (CAMAD) de Gustavo Petro eran necesarios. “Los CAMAD son una necesidad, porque no es posible ocultar la realidad que vemos todos los días en las calles. Es necesario responder con psiquiatras, psicólogos, médicos y enfermeros como se está haciendo”, dijo en su momento Vega.

Estos son algunos de los trinos de ciudadanos indignados por el calificativo que recibieron:

Por Redacción Bogotá

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar