Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
La foto a blanco y negro de José Francisco Romero junto a la cifra de 462 excombatientes asesinados retrata la crisis de violencia contra los firmantes desde el Acuerdo de Paz en 2016.
Hacia el medio día del 19 de abril, cuando Romero se dirigía a retirar su renta básica, fue atacado y asesinado en el kilómetro 5 de la vía que conduce hacia Yondó, en el sector de Caño Negro.
Romero era líder social y hacía parte de la Junta de Acción Comunal de la vereda Dosquebradas. Hizo su proceso de reincorporación en el ETCR Juan Carlos Castañeda, en el municipio de Remedios. Además, era hermano de otros dos firmantes de paz.
Desde el Componente Comunes del Consejo Nacional de Reincorporación (CNR) se refirieron a la alarmante situación que atraviesan los firmantes.
Lea también: Bolívar, azotado por la guerra: el Clan del Golfo se consolida y debilita al Estado
“Él, como tantos y tantas, creyó en la palabra, en la posibilidad de reconciliación, en la construcción de una Colombia distinta desde la reincorporación, la organización comunitaria y el trabajo por la paz. Hoy, su voz ha sido silenciada por la violencia que continúa persiguiendo a quienes le apostaron a la vida”, señalaron.
Asimismo, el CNR hizo un llamado a las autoridades para atender la situación. “Reiteramos el llamado urgente al Estado colombiano, al Gobierno Nacional, a las entidades encargadas de la protección y a la comunidad internacional ¡No puede haber paz mientras siguen matando a quienes la construyen!”.
En esa misma línea, el congresista y firmante de paz, Pedro Baracutao, rechazó el asesinato de José Francisco Romero a través de su red social X. “Que pare el exterminio de firmantes de paz. Asesinaron a José Francisco Romero Zamudio, en Yondó Antioquia. No es una cifra más, un dato cuantitativo. Fue asesinado en el sector conocido como Caño Negro, iba a retirar su renta básica. Es hermano de dos firmantes de paz”, dijo.
La crisis contra firmantes de paz
Los casos registrados por el Consejo Nacional de Reincorporación Comunes ascienden a 462 firmantes de paz asesinados desde que se firmó el Acuerdo de Paz. Sin embargo, la situación es más alarmante puesto que solo en lo que va del año se han registrado 18 asesinatos de excombatientes, cuatro en una misma semana de abril.
Según el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz) el pasado 12 de abril se reportó el asesinato de Robinson Gómez, firmante de paz que cumplía con su proceso de reincorporación. Fue asesinato en la vía pública del sector Puqui, en el municipio de Valdivia, Antioquia.
Ese mismo día también se reportó el asesinato del firmante de paz William Antonio Viloria en Chigorodó, Antioquia. Según la información recolectada por Indepaz, Viloria fue asesinado en la vereda Champitas, en zona rural del municipio.
Cinco días después, el 17 de abril, el firmante de paz Carlos Ángel Arango fue asesinado en Algeciras, Huila, donde realizaba labores de comercio de alimentos.
Sobre la situación en Antioquia, la Defensoría del Pueblo ha emitido alertas tempranas para los municipios de Apartadó, Carepa, Chigorodó, Turbo donde “el riesgo está determinado por los constantes homicidios selectivos que se vienen presentando en los cuatro municipios que componen el Eje Bananero antioqueño”.
Para el municipio de Valdivia, la Defensoría también emitió una alerta temprana por riesgo de consolidación del control territorial de los grupos armados en la zona.
✉️ Si le interesan los temas de paz, conflicto y derechos humanos o tiene información que quiera compartirnos, puede escribirnos a: cmorales@elespectador.com; jrios@elespectador.com; pmesa@elespectador.com o aosorio@elespectador.com.