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El alcalde encargado de Santa Marta, Andrés Rugeles, declaró la calamidad pública por los bajos niveles de agua en los afluentes que surten a los samarios. Mamatoco, la planta de tratamiento del distrito está por debajo de su capacidad en el 66%, lo que indica que esta opera con el 44%. En otras palabras, un déficit de 1.530 litros por segundo.
Se espera que tras la decisión de Rugeles, que se oficializó luego de un consejo de gestión de riesgo mediante el acuerdo 082, los recursos se agilicen y así se pueda llevar el agua potable a los 150 barrios que enfrentan desabastecimiento.
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Lo anterior se afirmó en el acuerdo 082 que ayuda a las autoridades distritales a tomar medidas: “Teniendo en cuenta la problemática de desabastecimiento de agua y considerando las condiciones climáticas extremas que han reducido los caudales de los ríos que alimentan las plantas de tratamiento, la Alcaldía de Santa Marta, en pleno uso de sus facultades, declaró la calamidad pública, que permite tomar las decisiones necesarias para implementar un 'Plan de Acción', que garantice el suministro de agua a todos los samarios”.
El pasado 9 de enero, el gobierno había enviado una respuesta al entonces alcalde Rafael Martínez, en la que se comprometía con la financiación del acueducto hasta el 2021 por 10 años con la inversión 20 mil millones de pesos anuales, esto si las condiciones macroeconómicas del país se mantenían para esa época.
La ciudad lleva más de ocho días sin agua. A los bajos niveles del líquido se suma la sequía a la que se enfrenta la costa Caribe y los incendios que consumen la Sierra Nevada. La ciudad habilitó cuatro pozos para que 50 carros cisterna los lleven a las comunidades.