Una particular forma de camuflar alucinógenos sorprendió a las autoridades de Bucaramanga. Un joven que simulaba una fractura en su pierna usaba el yeso para cargar cocaína, marihuana y bazuco.
Una llamada de un ciudadano a la línea 123 en la capital santandereana alertó a la Policía sobre la presencia de un hombre que estaría vendiendo droga frente a un colegio en el barrio Estoraques.
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Una patrulla de la Policía acudió al lugar y requisó a un joven que se desplazaba en muletas. Fue allí cuando al buscar dentro del vendaje de yeso, los uniformados hallaron las dosis empacadas en bolsas plásticas.
“Los agentes requisaron a esta persona que se movilizaba en muletas y al verificar el vendaje, ubicado en el área de una supuesta lesión de hueso, estaba más abultado de lo normal. En el interior encontraron varias dosis de alucinógenos en bolsas plásticas”, señaló el comandante de la Policía de Bucaramanga, general Manuel Vásquez.
El joven, de 20 años, fue capturado y será procesado por el delito de fabricación, porte y tráfico ilegal de estupefacientes.