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El cementerio de Málaga, en Santander, volvió a cerrar ante la falta de bóvedas para enterrar a las personas de la comunidad.
“Hubo un compromiso de la administración municipal, el cual no se cumplió y por lo tanto nos vemos obligados a ordenar el cierre”, dijo Jesús Parra, funcionario de la Secretaría de Salud departamental.
En diciembre de 2018 se presentó la misma situación. En ese entonces las autoridades construyeron 50 bóvedas con el objetivo de ampliar el cupo en el cementerio, pero después de cuatro meses la situación se volvió a presentar.
De acuerdo con el alcalde la localidad, Fredy Cáceres, solo quedan cuatro bóvedas disponibles. Asimismo, informó que la administración está gestionando la construcción de 130 bóvedas más.
“Estamos esperando una revisión a la convocatoria y conocer cuál sería la firma que construya esas bóvedas, con lo cual podríamos superar la emergencia”, explicó el funcionario.
Por el momento, los habitantes de Málaga deberán realizar los entierros de sus familiares en San José de Miranda o Enciso, localidades a 30 minutos de distancia.
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