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La estrategia que busca reducir la emisión de gases efecto invernadero con las Fuentes No Convencionales de Energía Renovable (FNCER) puede traer efectos negativos sobre los procesos y costos de la industria nacional.
La advertencia fue hecha por la Asociación Colombiana de Grandes Consumidores de Energía Industriales y Comerciales (Asoenergía), al momento que destacó la estrategia E2050 que busca reducir la emisión de gases efecto invernadero.
La agremiación advirtió que la estrategia E2050 avizora cambios en la matriz energética en la que se espera aumentar a más de 60% la producción de electricidad a partir de centrales solares y eólicas complementadas por las hidroeléctricas. Esta estrategia llevará a casi cero el uso del carbón y con ello la reducción considerable de las emisiones de gases de efecto invernadero.
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Asoenergía celebró la decisión que toma el país hacia un futuro sostenible. Pero hizo un llamado “para entender que el proceso de la descarbonización lleva más tiempo del considerado y a tener en cuenta que, las instalaciones industriales de gran escala dependen del carbón, por lo que la participación neta cero de dicho hidrocarburo en las industrias sería reemplazable sólo si las economías de escala justifican hacerlo y se logran mejoras en la eficiencia de los procesos y los costos”, dijo Sandra Fonseca, directora de Asoenergía.
El gremio del sector eléctrico ha planteado que los compromisos de reducción de emisión de gases efecto invernadero, y de cero emisiones, pueden potencializarse no solo con las FERNC en la oferta sino con la gestión Integral de la demanda, sin descontar los demás sectores emisores.
“En este escenario es que la demanda tiene a disposición nuevos modelos de negocios y nuevos avances tecnológicos como la digitalización, la descentralización y la electrificación, que impulsan las FERNC y renovables convencionales, estas últimas, ya usadas ampliamente en Colombia”, precisó Sandra Fonseca.
Además de la eficiencia energética se debe pensar en la autogestión que se realiza con las acciones activas de respuesta de la demanda ante señales económicas o incentivos tarifarios, y a los cambios de infraestructura propia como la autogeneración y el almacenamiento propio o en sitio, señala el gremio.
“Debemos estar atentos, ya que de la mano de la estrategia E2050 el Ministerio de Minas y Energía presentará para septiembre de este año la Hoja de Ruta definitiva para producir y exportar hidrógeno, así es como será visto como el potencial combustible de transición con ventajas competitivas importantes y con cero emisiones hacia el ambiente”, indicó la directora de Asoenergía.