Después de la tormenta que generó la propuesta de reforma tributaria de la comisión de expertos que se filtró a la prensa a principios de este año, finalmente este miércoles, tanto el Gobierno, el sector empresarial y voceros de dicha comisión, enfrentaron el reto de explicar públicamente por qué es necesaria una reforma estructural y cuáles son las razones para, por ejemplo, incrementar el IVA.
Preguntas que se resumen en una conclusión grande que salió durante el seminario macroeconómico convocado por la Anif y Fedesarrollo y titulado “La hora de las reformas estructurales”: de no transformarse la normatividad a través de la cual los colombianos tributan, en 2018 el nuevo Gobierno tendrá líos de fondo en los ingresos fiscales para financiar obras y programas sociales, es decir, habría un déficit fiscal porque se acabarían los impuestos temporales que ha venido arrastrando la “parchada” reforma tributaria actual.
De igual manera se insistió en que aún no hay un articulado oficial y que por eso deberá constituirse en estos meses para presentar el proyecto de Ley al Congreso a mediados de este como lo ha propuesto el Gobierno Nacional.
Sigue a El Espectador en WhatsAppDe un lado, el presidente de la Asociación Nacional de Comercio Exterior, Analdex, Javier Díaz, destacó la propuesta de la comisión, resaltando que es la más conveniente para el país, pues dijo que el sistema tributario actual genera un bajo nivel de recaudo frente al potencial, dado el nivel de desarrollo del país; “asimismo no contribuye a una mejor distribución del ingreso; es inequitativa horizontalmente ya que aplica un tratamiento diferente a personas y empresas similares; es complejo y difícil de administrar y castiga de manera importante la inversión, el empleo, el crecimiento y la competitividad”.
También, resaltó que para avanzar en una mejor política fiscal y obtener efectos positivos sobre el crecimiento económico, no solo es importante trabajar en el lado de los impuestos; sino también, avanzar en materia de eficiencia y equidad en el gasto público, tema que está por fuera de los términos de referencia de la comisión. “No solo basta con viajar en clase económica y ahorrar en la compra de cortinas para el Palacio de Nariño”, dijo Díaz.
Por su parte, el director de la Dirección Nacional de Impuestos y Aduanas (DIAN), dijo que la propuesta de la comisión abordó los temas sensibles que se necesitan cambiar con la nueva reforma, pues reconoció que como están las cosas solo este año el país dejará de recaudar $5,2 billones de la renta petrolera. Por lo cual, señaló, ese recurso se debe recaudar apretando aún más a los evasores.
“En Colombia tenemos un recaudo tributario que bordea el 15%, que comparado con diferentes países similares al nuestro está por debajo de lo que debería ser. A raíz de los cuestionamientos de la comisión hicimos muchos ajustes que nos ha permitido detectar hoy 210 mil contribuyentes con inconsistencias: 80 mil personas naturales en rentas y el resto personas jurídicas con inconsistencias en IVA. Esto va a permitir cumplir con la meta de este año de recaudar $4 billones más fruto de la lucha contra la evasión”, anotó Rojas.
Guillermo Perry, miembro de la comisión de expertos dijo que la reforma tiene un balance muy importante entre los objetivos de recaudo que se necesitan, los objetivos de equidad de grabar un poco más a los que tienen más e igual a los que tienen igual; de objetivos de eficiencia económica de facilitar el crecimiento y el empleo, y de simplicidad administrativa para bien de los contribuyentes y de la propia administración.
“Esto está bien balanceado en el conjunto de reforma, pero si uno coge un pedazo y se lo mide, va a decir a mí no me gusta que me graben el IVA a las tabletas, como dijo un ministro. Pero hay que mirar el resto de la reforma, es que no son solo las tabletas, todos los bienes estarían grabados con una tarifa baja. Entonces cuando uno comienza a mirar lo que a uno le molesta y no se da cuenta que el conjunto tiene un cierto equilibrio y que es indispensable para que haya educación y salud, pues entonces nadie va a estar contento nunca”, señaló Perry.