“La salida de Uber es una gran oportunidad para prestar un excelente servicio”: Taxis Libres

La gerente de la empresa de taxis más grande del país, Estefanía Hernández, habló con El Espectador sobre cómo el gremio se está profesionalizando y adaptando a las necesidades del usuario, según ella.

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Redacción Economía.
29 de enero de 2020 - 06:54 p. m.
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Este viernes la plataforma tecnológica de transporte Uber dejará de operar en Colombia por orden expresa de la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) tras el fallo de un juez que se dio a conocer el 20 de diciembre del año pasado. La decisión es producto de una demanda por competencia desleal presentada en 2016 por Taxis Libres (a través de su filial Cotech), la empresa con mayor número de conductores afiliados y que completará cuatro décadas de historia el próximo año.

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La gerente de la compañía, Estefanía Hernández, celebró la decisión al decir en entrevista con este diario que “ha sido un trabajo jurídico largo, la justicia se demora, pero llega”. Taxis Libres se ha mantenido en la posición que, según la normatividad, un vehículo particular no puede ser público, por lo que encuentran en aplicaciones como Uber una forma de competencia desleal. “Las aplicaciones prestan un servicio de transporte sustituto que hace las veces de un taxi, así esté pintado de otro color”, dijo la vocera.

"Uber respeta la ley y las decisiones emitidas por las autoridades. Sin embargo, decisiones como esta, responden también a la ausencia de una reglamentación del servicio de movilidad colaborativa a través de plataformas tecnológicas en Colombia", dijo en su momento Uber a través de un comunicado.

Pero no a todas las empresas del sector les parece que el modelo de Uber esté mal. Hay varias aplicaciones que trabajan con el servicio de particulares, así como de vehículos de placa blanca y también con taxis.

Didi, por ejemplo, es una de las aplicaciones de movilidad que opera en Colombia y que, desde octubre del año pasado, también incluyó a los taxis como parte de su oferta de servicios. En su momento, voceros de la plataforma aseguraron que contaban con 5.000 taxistas registrados; este es un modelo de operación similar al de competidores como Cabify.

Didi entró a operar a Colombia en junio de 2019 mediante el modelo de conectar usuarios con conductores de carros particulares, una categoría que se conoce como exprés en la plataforma. Este es el primer mercado de Latinoamérica en el que la empresa permite la operación de taxistas; la compañía también tiene presencia en países como Brasil, Chile y México.

La relación de Didi con los taxis, además de su inclusión en su oferta de servicios, pone en un lugar particular a la app a la hora de hablar de regulación en un ambiente en el que varios voceros de taxistas se han ido lanza en ristre contra todo lo que tenga cuatro ruedas, motor de combustión y no esté pintado de amarillo.

Paula Bernal, directora de asuntos gubernamentales de Didi para Colombia, dijo que como plataforma celebran los anuncios que el Gobierno ha hecho y los avances que se han dado para abordar el tema regulatorio: “vemos con optimismo que esto pueda llevar hacia una decisión regulatoria en Colombia. Confiamos en que la regulación vaya a entender las transformaciones digitales que propone la tecnología y la economía colaborativa y que sea una herramienta para equiparar las cargas de todos los actores. Somos una aplicación que conecta a los usuarios con conductores, no sólo particulares, sino también taxis. Estos procesos tienen que contemplar a todos los actores y celebramos esta decisión de plantear conversaciones”.

Por su parte, la visión de Hernández frente a la salida de Uber es que será “una gran oportunidad para prestar un excelente servicio a la ciudadanía”. La gerente es enfática en que la pluralidad de empresas los ayuda a ser más competitivos y los hace crecer, pero asegura que cualquier competencia debe ser legal y cumplir con lo que la norma demande.

" Río con esa promesa de que los taxistas van a mejorar su servicio. Si no lo hicieron antes, ¿por qué ahora sí cuando Uber dice que se va del país? Nos creen pendejos". "Hasta ahora los taxistas se dieron cuenta de que tienen problemas de servicio. Gracias por nada". Estos son apenas dos de los comentarios que las declaraciones de voceros de los taxis han despertado entre usuarios de redes sociales.

¿Pero cómo trabaja Taxis Libres para avanzar en ese propósito de ser competitivos? La empresa tiene una serie de cursos en convenio con el Sena y otras empresas para darle competencias laborales a los conductores afiliados, que son alrededor de 18.000 en las siete ciudades donde operan (Bogotá, Medellín, Cali, Bucaramanga, Manizales, Cúcuta y Santa Marta), y para garantizarle al usuario una mejor experiencia. Aunque la iniciativa responde a un decreto que planea la formación como opcional, la firma los ha hecho obligatorios para sus afiliados pensando en la productividad del gremio, de hecho, fueron pioneros en implementar la educación complementaria para taxistas hace 10 años. "Lo esencial para que una persona conduzca un taxi es que sea competente porque es un trabajo digno y puede ser profesional", recalca Hernández.

Actualmente, están abriendo progresivamente en varias ciudades nuevos cursos en equidad de género, apropiación cultural (turismo) y adaptación temprana a la tecnología, es decir, capacidad para utilizar la aplicación móvil que diseñaron hace unos años, pues creen que a través de la tecnología podrán, no sólo a facilitarle el trabajo al taxista, sino también identificar la necesidad de los usuarios.

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Hernández cuenta que el desarrollo de la aplicación se hizo pensando en que fuera intuitiva, pero también amigable con el usuario. Actualmente la utilizan unos 12.000 conductores en el país permanentemente. "Es un tema de adaptarnos para prestar un excelente servicio y demostrarle a los usuarios que podemos satisfacer esa necesidad", destacó la gerente.

También mantienen un diálogo permanente con las autoridades. El Ministerio de Transporte está haciendo modificaciones al decreto marco de la actividad (1079 de 2015) y ellos acompaña el proceso con la premisa de Hernández de que "la tecnología y las necesidades de los usuarios han cambiado. Necesitamos adaptarnos, flexibilizarnos, ser más productivos y generar confianza". La propuesta de Taxis Libres, en ese sentido, es que se lleve la trazabilidad del historial del conductor, las empresas en las que ha trabajado y el tiempo de servicio, por medio de la información de la tarjeta de control.

Del mismo modo, vienen pidiendo a los gobiernos locales que hagan un análisis para identificar la flota actual frente a la demanda. "Esperamos que, principalmente en Bogotá, donde el estudio no se actualiza desde hace 25 años, pero también en otras ciudades, las administraciones reconozcan que debe crecer “porque estamos cortos en el número de cumplimiento de solicitudes de servicio".

"Somos la unión de varias empresas y lo que queremos es inclusión para mejorar el servicio de taxi a través de la tecnología y la profesionalización de los conductores", destaca Hernández. Sólo en Bogotá, los conductores afiliados a esta empresa hacen alrededor de 100.000 servicios diarios y representan más del 30 % del parque automotor del servicio público individual.

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Pero Taxis Libres no es la única que tiene voz en esta discusión. Bernal, vocera de Didi en Colombia, asegura que ya han participado en conversaciones con el Gobierno y con el Congreso, además de sectores de taxistas y se muestra totalmente confiada en que, esta vez sí, podrá regularse la operación de plataformas de movilidad en el esquema de transporte de pasajeros en Colombia.

Sobre sus conversaciones con los taxistas, Bernal cuenta que “lo que vemos con convicción es que la tecnología es un excelente vehículo para generar transformaciones, también en los taxis. La eficiencia y las facilidades de estas plataformas son muy recibidas por ellos”.

Sin contar este nuevo intento (que aún no se ha materializado en una propuesta oficial, aunque hay un proyecto de ley del congresista Mauricio Toro, por ejemplo), el tema de las plataformas de movilidad ha pasado cinco veces por el Congreso sin ningún éxito. El Gobierno incluso creó una categoría de taxis de lujo que no ha despegado, cinco años después de su creación.

Según las cifras entregadas por Bernal, Didi ha invertido US$25 millones desde que arrancó a operar en el país y cuenta con 100.000 socios conductores, entre particulares y taxis, en la plataforma.

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Por Redacción Economía.

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