Los "regalos" de la ley de financiamiento suman $10 billones: oposición

Varios congresistas protestaron por una serie de beneficios que el proyecto pretende darle a las empresas, los cuales, según dicen, son incluso más altos de lo que pretende recaudar la norma en impuestos.

Redacción Economía.
19 de diciembre de 2018 - 12:44 a. m.
Congresistas organizadores. / Cortesía - @JorgeEduDiaz
Congresistas organizadores. / Cortesía - @JorgeEduDiaz

Los partidos de oposición protestaron entregando simbólicamente al Congreso 10 regalos en cuyas cajas escribieron los “principales obsequios (beneficios a las empresas) contemplados en la ley de financiamiento que se acaba de aprobar, en el marco de las fiestas navideñas”.

Los autores de la iniciativa convocaron esta mañana al lanzamiento de la campaña ‘Regalazos Tributarios’, un evento para revelar "cada regalo que nos deja este proyecto de ley”. Los organizadores calcularon que las grandes corporaciones y multinacionales recibirían más de $10 billones de aprobarse la ley de financiamiento, “mientras a la clase media y baja les pondrán impuestos”.

 

La senadora Aída Avella, en su calidad de ponente de la normativa ante la plenaria, explicó que dos de los más importantes beneficios son para las grandes empresas que realicen nuevas inversiones en el país, por más de un $1 billón. “Además de ser discriminatorios, los blindan jurídicamente, ya que las empresas siempre mantendrán los mismos términos tributarios, que en este caso son del 27 % del impuesto de renta”.

También se plantea exonerar a las grandes empresas del llamado impuesto a la riqueza, el cual significa en promedio $4 billones al año que van a dejar de ser recaudados.

 

Así mismo, se mantendrán los beneficios tributarios a las grandes empresas, lo que, según cálculos de los miembros del Legislativo, podría significar para el Estado, la recolección de $8 billones, “que se utilizarían en la educación o el pago pensional; yendo en contravía del objetivo de la propia ley que es recaudar”.

Además, de acuerdo con Avella, se permite a algunas entidades del Estado, aumentar los gastos en el personal, es decir que “burocracia sin límite, abriendo una nueva vena rota para el presupuesto nacional”.

Por su parte, la representante a la Cámara por Bogotá Juanita Goebertus dijo que en realidad se trata de una ley de desfinanciamiento que recauda $6,8 billones y al mismo tiempo destina a beneficios $9,2 billones. “Todos esos regalos nos ponen a sudar al resto de los colombianos pagando más impuestos”, dijo en un video explicativo.

 

La congresista Ángela María Robledo aseguró que “la bancada alternativa está unida contra esta nefasta y regresiva reforma”.

 

El presidente, Iván Duque, insistió durante un evento público esta tarde que espera que la ley de financiamiento salga adelante “porque le permite a Colombia reactivar el crecimiento de esta economía”. Luego indicó que incrementos mediocres de 3,5 % o 2,6 % “hace que estemos a 50 años de ser un país de ingreso alto; a esta economía hay que colocarla por encima de 4 % quitándole la carga a los que generan empleo, motivando la inversión y eso es lo que estamos haciendo, por eso no tengo ninguna actitud vergonzante”, dijo.

Por Redacción Economía.

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