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Paralela a los protocolos del palacio, la tradición popular inglesa dicta que, junto al anuncio de su compromiso y las primeras apariciones públicas en compañía de la familia real en la tradicional misa de navidad, la carrera de fondo para convertirse oficialmente en un royal no está completa hasta que no se cuenta con una figura de cera en el famoso museo Madame Tussauds de la ciudad de Londres.
En el caso de Meghan Markle, la futura esposa del príncipe Enrique, ya estaba tardando demasiado en anunciar su desembarco en la sección de la exposición dedicada a la monarquía británica, pero la espera ha concluido. Mediante un comunicado, los responsables de la institución han hecho público que ya están trabajando en la efigie de la antigua protagonista del drama legal Suits y que esta se unirá en breve a las de su familia política.
"La futura princesa, novia y antigua reina de los juzgados llegará sana y salva a la mundialmente famosa atracción londinense a principios de mayo de 2018. Meghan ocupará su lugar junto a su futuro marido", han adelantado.
Los detalles acerca de qué ropa lucirá su figura de cera se han mantenido por el momento en el más estricto secreto, aunque lo habitual es que se trate de reproducir alguno de los modelitos más distintivos que ha lucido hasta ahora: como el vestido o el abrigo que eligió para el primera aparición junto a Enrique en Inglaterra o la falda y el top con el que posó para sus fotos oficiales.