Noticias

Últimas Noticias

    Política

    Judicial

      Economía

      Mundo

      Bogotá

        Entretenimiento

        Deportes

        Colombia

        El Magazín Cultural

        Salud

          Ambiente

          Investigación

            Educación

              Ciencia

                Género y Diversidad

                Tecnología

                Actualidad

                  Reportajes

                    Historias visuales

                      Colecciones

                        Podcast

                          Opinión

                          Opinión

                            Editorial

                              Columnistas

                                Caricaturistas

                                  Lectores

                                  Blogs

                                    Suscriptores

                                    Recomendado

                                      Contenido exclusivo

                                        Tus artículos guardados

                                          Somos El Espectador

                                            Estilo de vida

                                            La Red Zoocial

                                            Gastronomía y Recetas

                                              La Huerta

                                                Moda e Industria

                                                  Tarot de Mavé

                                                    Autos

                                                      Juegos

                                                        Pasatiempos

                                                          Horóscopo

                                                            Música

                                                              Turismo

                                                                Marcas EE

                                                                Colombia + 20

                                                                BIBO

                                                                  Responsabilidad Social

                                                                  Justicia Inclusiva

                                                                    Desaparecidos

                                                                      EE Play

                                                                      EE play

                                                                        En Vivo

                                                                          La Pulla

                                                                            Documentales

                                                                              Opinión

                                                                                Las igualadas

                                                                                  Redacción al Desnudo

                                                                                    Colombia +20

                                                                                      Destacados

                                                                                        BIBO

                                                                                          La Red Zoocial

                                                                                            ZonaZ

                                                                                              Centro de Ayuda

                                                                                                Newsletters
                                                                                                Servicios

                                                                                                Servicios

                                                                                                  Empleos

                                                                                                    Descuentos

                                                                                                      Idiomas

                                                                                                      Cursos y programas

                                                                                                        Más

                                                                                                        Cromos

                                                                                                          Vea

                                                                                                            Blogs

                                                                                                              Especiales

                                                                                                                Descarga la App

                                                                                                                  Edición Impresa

                                                                                                                    Suscripción

                                                                                                                      Eventos

                                                                                                                        Pauta con nosotros

                                                                                                                          Avisos judiciales

                                                                                                                            Preguntas Frecuentes

                                                                                                                              Contenido Patrocinado
                                                                                                                              13 de febrero de 2021 - 09:00 p. m.

                                                                                                                              Andrés “el Turco” Gil, académico del vallenato

                                                                                                                              El denominado “rey del disonante”, que ha formado a algunos de los más importantes acordeoneros de Colombia, creó la primera Academia Vallenata en 1979 y, 20 años después, Los Niños del Vallenato. Hoy se reinventa para asegurar que su legado siga vigente.

                                                                                                                              Andrea Barraza Cabana *

                                                                                                                              Con Los Niños del Vallenato, Andrés “el Turco” Gil ha sido embajador del vallenato en países como Japón, China, Panamá, Argentina, Portugal, Escocia, Italia y Reino Unido. / Fundación del Festival de la Leyenda Vallenata

                                                                                                                              El capítulo del Turco Gil en la historia del vallenato abarca más de cincuenta años y no ha acabado. Fue un acordeonero notable, con más de veinte producciones en su juventud, y luego creó la primera academia de este folclor, con la que lleva cuarenta años y ha formado a muchos reyes vallenatos y artistas prestigiosos y a miles de músicos, que han acercado el vallenato a una calidad de conservatorio.

                                                                                                                              No había cumplido veinte años cuando, en 1967, sacó su primer disco (de 78 rpm), con tres canciones de su autoría, acompañado de la voz del Pibe Rivera. El legendario Alfredo Gutiérrez reaccionó con un “¡el Turco Gil se adelantó treinta años en la música vallenata!”. No estaba exagerando, y esa percepción influyó en la trayectoria del precoz músico.

                                                                                                                              * Le recomendamos: Gilberto Santa Rosa se suma a “En Barranquilla me quedo”, homenaje a Joe Arroyo.

                                                                                                                              Read more!

                                                                                                                              Cronistas del género consultados creen que el Turco Gil dejó la carrera musical porque sí se había adelantado a su tiempo como ejecutante del acordeón, y mientras muchos músicos querían aprender de su técnica, paradójicamente el público no lo aclamaba como a otros. Eso lo habría llevado a dedicarse a enseñar. Ante esto, el maestro guarda silencio al otro extremo de la línea, como quien no quiere ahondar en el asunto.

                                                                                                                              Así, lo que aprendió y lo que enseñó son la marca de su vida. Lo que aprendió desde niño le permitió revolucionar la ejecución del instrumento y ser llamado el “rey del disonante”, apelativo que le puso el locutor Jaime Pérez Parodi. Y lo que enseñó y se propone seguir enseñando a través de su academia es su legado.

                                                                                                                              Su formación

                                                                                                                              Andrés Eliécer Gil Torres, como lo nombraron sus padres, tuvo la suerte que tienen pocos de encontrar su destino nada más llegar al mundo. Nació en Villanueva, La Guajira, cuna del vallenato, en 1948. En medio de los tambores y las trompetas de su tío director de orquesta, que se confundieron con su llanto y le anunciaban su futuro en la música. Ese mismo día fue bautizado por su abuelo paterno como el Turco, como es conocido desde entonces más que por su nombre.

                                                                                                                              Desde muy niño comenzó su educación musical por una tradición familiar de directores de orquestas. Su tío Reyes Torres tenía una de las mejores de La Guajira, y su padre, Juan Manuel Gil, fue un trompetista inquieto y director de la Orquesta de Juancho Gil.

                                                                                                                              Con solo siete años, tocaba trompeta y leía partituras; luego estudió saxofón, clarinete y trombón. Se estaba formando para ser músico de orquesta, como su papá y su tío, hasta que se le atravesó un acordeón.

                                                                                                                              Read more!

                                                                                                                              * Puede leer: Fumaratto y la exploración de la guaracha electrónica.

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                              Las frecuentes parrandas en casa de los Gil, debajo del palo de almendros de doña Luisa Torres, su madre, adonde asistían personajes como Rafael Escalona, Guillermo Buitrago, Leandro Díaz y Emiliano Zuleta, avivaron la curiosidad del adolescente, que con el acordeón de Zuleta empezó a tocar y sacar las notas que daba “el arrugado”, como es conocido.

                                                                                                                              Notó que era un instrumento limitado, que solo tenía siete sonidos de los doce que componen la música. “Era como una máquina de escribir a la que le falta el 40 % de las letras, no puedes escribir todo lo que tú quisieras y eso me llamó la atención”. Esta insatisfacción con el acordeón lo llevó a explorarlo y experimentar con él. Tenía varios años viviendo en Valledupar cuando, hacia 1966-1967, llegó el acordeón diatónico con los doce sonidos.

                                                                                                                              El rey del disonante

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                              Su primer disco mostró los acordes diferentes que le sacaba al acordeón. La disonancia con acordes consonantes que tenía nunca se había visto en el vallenato en un acordeón diatónico. Estaba muy joven y era incomprendido.

                                                                                                                              Fue el maestro Antonio María Peñaloza, coautor de Te olvidé, el himno del Carnaval de Barranquilla, quien lo entendió. En 1969, Peñaloza llegó a Valledupar para concursar en Canción inédita de la segunda versión del Festival de la Leyenda Vallenata. Necesitaba músicos que leyeran partituras y todos le dijeron que el único era el Turco Gil. Ese encuentro entrañable duró mucho tiempo, porque Peñaloza pronto se estableció en Valledupar.

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                              * Le puede interesar: Nathaly Vega, en plena exploración sonora.

                                                                                                                              Con el maestro Peñaloza estudió armonía por más de cinco años y adquirió la formación que necesitaba para convertirse en el acordeonero que llegó a ser. Logró incluso adaptar diversos ritmos y crear lo que él llamó “paturky”, un tipo de paseo. Una mezcla armónica de cumbias, vallenatos y expresiones tropicales caribeñas. Esa singularidad lo convirtió en un músico muy discutido.

                                                                                                                              El camino a la enseñanza

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                              El dominio único del instrumento lo llevó a ser buscado para aprender cómo era que tocaba el acordeón. Empezó enseñando en el patio de su casa. Con el tiempo se fueron sumando tantos alumnos que ya no los podía atender por turnos y fue cuando en la misma casa improvisó en un quiosco la primera aula de clases.

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                              En 1979 creó la Academia Vallenata El Turco Gil, la primera de este folclor. Hoy la institución puede mostrar que formó a célebres acordeoneros como Sergio Luis Rodríguez, que ha ganado tres Grammy Latinos, rey infantil y rey vallenato; Cocha Molina, rey de reyes y quien grabó con Gloria Estefan; Lucas Dangond, Luis José Villa, Manuel Julián Martínez, Javier Mata; Cristian Camilo Peña, rey vallenato; Juanca Ricardo, Juan Mario de la Espriella, Gustavo García y Daniel Maestre, entre muchos otros artistas.

                                                                                                                              Los Niños del Vallenato

                                                                                                                              En 1999 creó Los Niños del Vallenato con los más talentosos de su academia, que han sido embajadores del folclor en Noruega, Japón, China, Panamá, Argentina, Portugal, Escocia, Italia, Reino Unido y otros lugares del mundo, donde han interpretado clásicos de Escalona, Emiliano Zuleta, Luis Enrique Martínez, Leandro Díaz y Lorenzo Morales, entre otros juglares.

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                              Estuvieron en la Casa Blanca en tiempos del mandato de Bill Clinton, quien quedó enamorado de la magia del acordeón, la caja y la guacharaca. En su libro ¿Cómo cada uno de nosotros puede cambiar el mundo? (2007), el exmandatario le dedicó unas palabras: “Cuánto me gustaría que en cada área del conflicto hubiese un maestro como el Turco Gil y niños como Los Niños Vallenatos”.

                                                                                                                              El futuro de la academia

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                              A sus 72 años, está tomando decisiones sobre su legado. “Soy consciente de la necesidad de reinventar nuestra institución para asegurar su permanencia. Arrastramos un problema financiero y la pandemia nos ha perjudicado mucho, obligándonos a cerrar ya más de diez meses”, anota. Nos cuenta que una de las primeras decisiones es pedirle al expresidente Juan Manuel Santos, su amigo, que le ayude a conformar una junta asesora de alto nivel para diseñar un plan estratégico de mediano y largo plazo.

                                                                                                                              Dice que su activo en problemas vale mucho más que la deuda y que su plan incluye un fuerte componente virtual e internacionalizar la academia, además de ampliar su cobertura nacional. “Puede poner esto: el presidente Santos nos ayuda a hacer el plan y me voy con él a tocar la puerta de Bill Clinton. Por mí, que la academia complete un siglo con el nombre del Turco Gil, Santos y Clinton”.

                                                                                                                              Sobre la Academia de Música del “Turco” Gil

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                              Desde 1979, Andrés Eliécer Gil Torres dicta clases de acordeón bajo las sombras que proporcionan los árboles del patio de su casa, en Valledupar. Sin embargo, formalmente la Academia se consolidó en 1985.

                                                                                                                              Doce años después, en 1997, debido al incremento del número de estudiantes, fue necesario trasladar la escuela a un lugar más amplio. Su nueva ubicación fue en la calle del Cesar o carrera 7ª con la calle 13 B, en la capital vallenata, en donde Gil logró contratar a cinco docentes que trabajaron bajo su batuta. Allí llegó a tener 110 alumnos. En 1999, se trasladó al Callejón de la Purrututú y, en 2000, la sede con especificaciones académicas se estableció en el barrio Los Mayales.

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                              La historia de Los niños del vallenato

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                              Con algunos de sus más destacados estudiantes, Andrés “el Turco” Gil conformó una agrupación de niños, cuyas primeras presentaciones fueron de tipo local, participando en actos realizados en lugares como iglesias, colegios y demás instituciones públicas y privadas. Su primera actuación en el exterior fue en septiembre de 1999, en el marco del Festival Internacional de Acordeón Infantil en Panamá. Durante este evento fue que el colectivo de jóvenes talentos recibió el nombre de Los niños del vallenato. Con los años, esta iniciativa del “Turco” Gil se convirtió en una organización de padres de familia de los niños integrantes, con personería jurídica independiente.

                                                                                                                              * De la Fundación Color de Colombia.

                                                                                                                              Con Los Niños del Vallenato, Andrés “el Turco” Gil ha sido embajador del vallenato en países como Japón, China, Panamá, Argentina, Portugal, Escocia, Italia y Reino Unido. / Fundación del Festival de la Leyenda Vallenata

                                                                                                                              El capítulo del Turco Gil en la historia del vallenato abarca más de cincuenta años y no ha acabado. Fue un acordeonero notable, con más de veinte producciones en su juventud, y luego creó la primera academia de este folclor, con la que lleva cuarenta años y ha formado a muchos reyes vallenatos y artistas prestigiosos y a miles de músicos, que han acercado el vallenato a una calidad de conservatorio.

                                                                                                                              No había cumplido veinte años cuando, en 1967, sacó su primer disco (de 78 rpm), con tres canciones de su autoría, acompañado de la voz del Pibe Rivera. El legendario Alfredo Gutiérrez reaccionó con un “¡el Turco Gil se adelantó treinta años en la música vallenata!”. No estaba exagerando, y esa percepción influyó en la trayectoria del precoz músico.

                                                                                                                              * Le recomendamos: Gilberto Santa Rosa se suma a “En Barranquilla me quedo”, homenaje a Joe Arroyo.

                                                                                                                              Read more!

                                                                                                                              Cronistas del género consultados creen que el Turco Gil dejó la carrera musical porque sí se había adelantado a su tiempo como ejecutante del acordeón, y mientras muchos músicos querían aprender de su técnica, paradójicamente el público no lo aclamaba como a otros. Eso lo habría llevado a dedicarse a enseñar. Ante esto, el maestro guarda silencio al otro extremo de la línea, como quien no quiere ahondar en el asunto.

                                                                                                                              Así, lo que aprendió y lo que enseñó son la marca de su vida. Lo que aprendió desde niño le permitió revolucionar la ejecución del instrumento y ser llamado el “rey del disonante”, apelativo que le puso el locutor Jaime Pérez Parodi. Y lo que enseñó y se propone seguir enseñando a través de su academia es su legado.

                                                                                                                              Su formación

                                                                                                                              Andrés Eliécer Gil Torres, como lo nombraron sus padres, tuvo la suerte que tienen pocos de encontrar su destino nada más llegar al mundo. Nació en Villanueva, La Guajira, cuna del vallenato, en 1948. En medio de los tambores y las trompetas de su tío director de orquesta, que se confundieron con su llanto y le anunciaban su futuro en la música. Ese mismo día fue bautizado por su abuelo paterno como el Turco, como es conocido desde entonces más que por su nombre.

                                                                                                                              Desde muy niño comenzó su educación musical por una tradición familiar de directores de orquestas. Su tío Reyes Torres tenía una de las mejores de La Guajira, y su padre, Juan Manuel Gil, fue un trompetista inquieto y director de la Orquesta de Juancho Gil.

                                                                                                                              Con solo siete años, tocaba trompeta y leía partituras; luego estudió saxofón, clarinete y trombón. Se estaba formando para ser músico de orquesta, como su papá y su tío, hasta que se le atravesó un acordeón.

                                                                                                                              Read more!

                                                                                                                              * Puede leer: Fumaratto y la exploración de la guaracha electrónica.

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                              Las frecuentes parrandas en casa de los Gil, debajo del palo de almendros de doña Luisa Torres, su madre, adonde asistían personajes como Rafael Escalona, Guillermo Buitrago, Leandro Díaz y Emiliano Zuleta, avivaron la curiosidad del adolescente, que con el acordeón de Zuleta empezó a tocar y sacar las notas que daba “el arrugado”, como es conocido.

                                                                                                                              Notó que era un instrumento limitado, que solo tenía siete sonidos de los doce que componen la música. “Era como una máquina de escribir a la que le falta el 40 % de las letras, no puedes escribir todo lo que tú quisieras y eso me llamó la atención”. Esta insatisfacción con el acordeón lo llevó a explorarlo y experimentar con él. Tenía varios años viviendo en Valledupar cuando, hacia 1966-1967, llegó el acordeón diatónico con los doce sonidos.

                                                                                                                              El rey del disonante

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                              Su primer disco mostró los acordes diferentes que le sacaba al acordeón. La disonancia con acordes consonantes que tenía nunca se había visto en el vallenato en un acordeón diatónico. Estaba muy joven y era incomprendido.

                                                                                                                              Fue el maestro Antonio María Peñaloza, coautor de Te olvidé, el himno del Carnaval de Barranquilla, quien lo entendió. En 1969, Peñaloza llegó a Valledupar para concursar en Canción inédita de la segunda versión del Festival de la Leyenda Vallenata. Necesitaba músicos que leyeran partituras y todos le dijeron que el único era el Turco Gil. Ese encuentro entrañable duró mucho tiempo, porque Peñaloza pronto se estableció en Valledupar.

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                              * Le puede interesar: Nathaly Vega, en plena exploración sonora.

                                                                                                                              Con el maestro Peñaloza estudió armonía por más de cinco años y adquirió la formación que necesitaba para convertirse en el acordeonero que llegó a ser. Logró incluso adaptar diversos ritmos y crear lo que él llamó “paturky”, un tipo de paseo. Una mezcla armónica de cumbias, vallenatos y expresiones tropicales caribeñas. Esa singularidad lo convirtió en un músico muy discutido.

                                                                                                                              El camino a la enseñanza

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                              El dominio único del instrumento lo llevó a ser buscado para aprender cómo era que tocaba el acordeón. Empezó enseñando en el patio de su casa. Con el tiempo se fueron sumando tantos alumnos que ya no los podía atender por turnos y fue cuando en la misma casa improvisó en un quiosco la primera aula de clases.

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                              En 1979 creó la Academia Vallenata El Turco Gil, la primera de este folclor. Hoy la institución puede mostrar que formó a célebres acordeoneros como Sergio Luis Rodríguez, que ha ganado tres Grammy Latinos, rey infantil y rey vallenato; Cocha Molina, rey de reyes y quien grabó con Gloria Estefan; Lucas Dangond, Luis José Villa, Manuel Julián Martínez, Javier Mata; Cristian Camilo Peña, rey vallenato; Juanca Ricardo, Juan Mario de la Espriella, Gustavo García y Daniel Maestre, entre muchos otros artistas.

                                                                                                                              Los Niños del Vallenato

                                                                                                                              En 1999 creó Los Niños del Vallenato con los más talentosos de su academia, que han sido embajadores del folclor en Noruega, Japón, China, Panamá, Argentina, Portugal, Escocia, Italia, Reino Unido y otros lugares del mundo, donde han interpretado clásicos de Escalona, Emiliano Zuleta, Luis Enrique Martínez, Leandro Díaz y Lorenzo Morales, entre otros juglares.

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                              Estuvieron en la Casa Blanca en tiempos del mandato de Bill Clinton, quien quedó enamorado de la magia del acordeón, la caja y la guacharaca. En su libro ¿Cómo cada uno de nosotros puede cambiar el mundo? (2007), el exmandatario le dedicó unas palabras: “Cuánto me gustaría que en cada área del conflicto hubiese un maestro como el Turco Gil y niños como Los Niños Vallenatos”.

                                                                                                                              El futuro de la academia

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                              A sus 72 años, está tomando decisiones sobre su legado. “Soy consciente de la necesidad de reinventar nuestra institución para asegurar su permanencia. Arrastramos un problema financiero y la pandemia nos ha perjudicado mucho, obligándonos a cerrar ya más de diez meses”, anota. Nos cuenta que una de las primeras decisiones es pedirle al expresidente Juan Manuel Santos, su amigo, que le ayude a conformar una junta asesora de alto nivel para diseñar un plan estratégico de mediano y largo plazo.

                                                                                                                              Dice que su activo en problemas vale mucho más que la deuda y que su plan incluye un fuerte componente virtual e internacionalizar la academia, además de ampliar su cobertura nacional. “Puede poner esto: el presidente Santos nos ayuda a hacer el plan y me voy con él a tocar la puerta de Bill Clinton. Por mí, que la academia complete un siglo con el nombre del Turco Gil, Santos y Clinton”.

                                                                                                                              Sobre la Academia de Música del “Turco” Gil

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                              Desde 1979, Andrés Eliécer Gil Torres dicta clases de acordeón bajo las sombras que proporcionan los árboles del patio de su casa, en Valledupar. Sin embargo, formalmente la Academia se consolidó en 1985.

                                                                                                                              Doce años después, en 1997, debido al incremento del número de estudiantes, fue necesario trasladar la escuela a un lugar más amplio. Su nueva ubicación fue en la calle del Cesar o carrera 7ª con la calle 13 B, en la capital vallenata, en donde Gil logró contratar a cinco docentes que trabajaron bajo su batuta. Allí llegó a tener 110 alumnos. En 1999, se trasladó al Callejón de la Purrututú y, en 2000, la sede con especificaciones académicas se estableció en el barrio Los Mayales.

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                              La historia de Los niños del vallenato

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                              Con algunos de sus más destacados estudiantes, Andrés “el Turco” Gil conformó una agrupación de niños, cuyas primeras presentaciones fueron de tipo local, participando en actos realizados en lugares como iglesias, colegios y demás instituciones públicas y privadas. Su primera actuación en el exterior fue en septiembre de 1999, en el marco del Festival Internacional de Acordeón Infantil en Panamá. Durante este evento fue que el colectivo de jóvenes talentos recibió el nombre de Los niños del vallenato. Con los años, esta iniciativa del “Turco” Gil se convirtió en una organización de padres de familia de los niños integrantes, con personería jurídica independiente.

                                                                                                                              * De la Fundación Color de Colombia.

                                                                                                                              Por Andrea Barraza Cabana *

                                                                                                                              Ver todas las noticias
                                                                                                                              Read more!
                                                                                                                              Read more!
                                                                                                                              Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
                                                                                                                              Aceptar