Hace algunos meses Anna Vicens, sommelier española y presidenta de la Asociación Catalana de Sommeliers pasó por Gastronomía y recetas de El Espectador para hablar de una de las bebidas con más tradición del mundo, el vino, ese mismo que se roba las miradas de todos los comensales en la mesa por su versatilidad y su multiplicidad de usos a la hora de maridar o acompañar un plato.
Afirmó también que antes el vino era un tema más de exclusividad, pero que ahora ya está más presente en todas las mesas. “Supongo que también porque el vino es muy accesible. Es decir, todos los bolsillos se pueden permitir comprar una botella de vino. Antes a lo mejor era algo más como para celebraciones y ocasiones especiales, ahora mismo hace parte de la canasta familiar, incluso, se puede consumir para acompañar un plato, para pasar una tarde o hasta para acompañar un buen libro”
Este protagonista de la mesa tiene sabores intensos y complejos, matices de frutas, especias y otras texturas distintivas, así que llevarlo a la mesa es un verdadero descubrimiento, pero, ¿qué pasa cuando el antojo por esta bebida se activa en casa o sale alguna celebración de improviso y no hay un sacacorchos a la mano para destapar la botella? Hoy te damos algunos trucos para abrirla y decir ¡Salud!
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Lo primero que debes saber es que estas técnicas caseras te pueden sacar de apuros, pero que también es importante que tengas las herramientas de cocina ideales para hacer este proceso:
Tornillo, destornillador y martillo
No es el método más práctico, ni seguro, vas a necesitar fuerza para llevar a cabo el proceso. La idea está en tomar un tornillo largo e introducirlo en el corcho, dejando por fuera unos centímetros para poder manipularlo sin problema. Luego, pon la parte trasera del martillo en el espacio que dejaste libre, empujando el corcho hacia afuera para poder abrir la botella.
Usa un cuchillo de sierra
Busca en tu cocina un cuchillo de cierre que tenga un ancho menor al del corcho. Cuando tengas este utensilio a la mano, procede a poner la botella de manera vertical en una superficie donde no corra peligro de romperse, luego realiza movimientos “pendulares” y hazle presión hacia abajo, clava bien el cuchillo y hala de forma suave para retirarlo. No es una práctica muy segura, así que ten mucho cuidado.
Calor en el corcho
Usa calor en la parte de la botella que está debajo del corcho girándola durante 1 minuto para que este se mueva hacia arriba y salga. La botella de vino tiene que estar a temperatura ambiente para evitar accidentes, si haces este proceso con una botella fría podría explotarse. El calor hará que el aire se expanda.
Un zapato
Pon la botella de vino dentro de un zapato y golpéalo contra la pared varias veces para que el corcho se afloje y salga.
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