Gastronomía y recetas
Publicidad

“Un sabor desilusionante”, una sopa inspirada en un libro de Laura Esquivel

Íntimas suculencias es una de las obras literarias más destacadas de Laura Esquivel Valdés, escritora y política mexicana. Hoy le da paso a una propuesta gastronómica que se centra en el relato de un plato que tiene un vínculo con la profunda admiración.

Diana Peña Castañeda / @la_libreria_patisserie
17 de noviembre de 2023 - 08:52 p. m.
Una propuesta gastronómica inspirada en una obra literaria.
Una propuesta gastronómica inspirada en una obra literaria.
Foto: Cortesía Diana Peña

Un poco de la historia de este plato

Una sopa recién hecha, muy caliente, siempre tiene la virtud de la unión familiar. La de manzanas de Íntimas suculencias de Laura Esquivel entremezcla la laboriosa e íntima preparación de la receta con el orgullo que motiva la vida admirable del tío Romero: “Sencillo, bueno, inteligente, guapo, simpático, maravilloso, un político ilustre, importante y bien pagado.” De ahí, que no solo cada ingrediente sea añadido de modo preciso, sino que se reúna toda la familia para cocinarla mientras se enaltecen sus probidades, como si se tratase del más honorable discurso público.

En el relato este plato tiene un vínculo con la profunda admiración. La visita del tío Romero era la única razón para aderezar la sopa. El esmero para agradarlo se hace evidente en la experticia para cortar las manzanas, en la exactitud de los tiempos de cocción, en el orden para incorporar el jitomate, la cebolla, la sal, la pimienta, en el modo para revolver el caldillo y dorar la harina. Al ser sus parientes, con esta sopa también se honra la identidad familiar “… En todo México no podía existir una familia de mejor casta, linaje y alcurnia...”

Por supuesto, el sentimiento también se reconoce en la comida. A medida que avanza la preparación de la sopa, lo obsceno de la vida de aquel pariente se pone en evidencia. Ni la lumbre ni el lector esperábamos tal final. Él no era lo que parecía. Pero en el fondo, más que perderlo, el verdadero dolor significó el quiebre del orgullo de emparentar con alguien tan ilustre, ahora un simple muerto señalado y odiado. El encanto de la preparación quedó reducido a un “sabor desilusionante” encarnado de manera escabrosa en la memoria incisiva de la sopa de manzanas, la preferida de tío Romero.

Nosotros te recomendamos: “Café para un velorio”, una bebida inspirada en una novela de Jorge Amado

Gastronomía: Latinoamericana .

Usa caldo de pollo en esta receta

  • Tiempo de preparación: 40 minutos.
  • Tiempo de cocción: 30 minutos.
  • Porciones: 4.

Ingredientes

  • 3 manzanas
  • 6 tazas de caldo de pollo concentrado
  • 2 jitomates grandes (tomate rojo)
  • 1 cebolla
  • 2 cucharadas de harina
  • 1 cucharada de perejil
  • Aceite de olivas
  • Sal y pimienta al gusto

Lee también: Restaurantes de Barranquilla, Córdoba y Mérida se estrenan en la lista de 100 mejores

Preparación

Pelar las manzanas y cortarlas en cuadritos.

Remojarlas en agua con una cucharada de sal para evitar que se oxiden.

Disponer en una bandeja el jitomate en mitades, la cebolla en trozos.

Bañar con un buen chorro de aceite de oliva, sal y pimienta. Asar durante 10 minutos. Moler. Debe quedar una salsa muy espesa.

Dorar la harina cuidando que no queden grumos.

Agregar poco a poco la salsa de jitomates asados y el caldo de pollo.

Agregar la sal y pimienta.

Adicionar las manzanas escurridas y dejar hervir hasta que ablanden.

Servir la sopa bien caliente con un poco de perejil picado.

Una historia para recordar: “La cocina debe ser honesta, no elaborada para desencantarse”: Mariana Orozco

Notas al margen de la receta

Un giro sutil para esta receta podrían ser unas notas de jerez o brandy en el fondo (se puede lograr dorando previamente las manzanas con los jitomates y cebolla). Unos cuantos dientes de ajo también asados dan un toque picante y contundente. ¿La cebolla? Blanca, quizás puerro. Un poco de tocineta asada picada y algo de crema agria al momento de servir agregan un placer deleitoso.

En fin, aquella es la receta que se preparaba para el tío Romero, pero como dice en alguna parte del libro: “Uno es lo que come, con quién lo come y cómo lo come. La nacionalidad no la determina el lugar donde uno fue dado a luz, sino los sabores y los olores que nos acompañan desde niños.” En el arte culinario, las posibilidades resbalan a través de los sentidos.

¡Trucos de la abuela!

Si te gusta la cocina y eres de los que crea recetas en busca de nuevos sabores, escríbenos al correo de Edwin Bohórquez Aya (ebohorquez@elespectador.com) o al de Tatiana Gómez Fuentes (tgomez@elespectador.com) para conocer tu propuesta gastronómica. 😊🥦🥩🥧

Por Diana Peña Castañeda / @la_libreria_patisserie

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar