Guerrilleros disfrazados de militares plagiaron los diputados Juan Carlos Narváez, Jairo Hoyos, Alberto Quintero, Édison Pérez, Héctor Fabio Arizmendi, Javier Giraldo, Ramiro Echeverri, Rufino Varela, Carlos Charry, Carlos Barragán, Nacianceno Orozco y Sigifredo López.
Ese día los guerrilleros ingresaron al recinto simulando la evacuación del edificio ante la supuesta amenaza de una bomba.
Posteriormente, un informe de la Fiscalía puso al descubierto que los asambleístas fueron asesinados por las Farc. Los impactos de bala fueron recibidos por la espalda y en algunos casos recibieron hasta 15 balazos.
Estos hallazgos fueron ratificados por una misión internacional de la OEA. Los diputados fueron sepultados en septiembre de 2007. De la masacre sólo se salvó Sigifredo López, quien al momento de su liberación comentó que a los pocos días de su secuestro fue separado de su grupo de compañeros.
A la fecha ninguno de los familiares de los diputados ha entablado una acción de reparación contra el Estado.