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Los hoteles de “Messi” y “Mario Bros”: así habría lavado dinero el Clan del Golfo

Al menos nueve hoteles han sido identificados por la Fiscalía como fachadas comerciales de la organización criminal. La mayoría estaban concentrados en el Urabá antioqueño, corazón operacional de la estructura sucesora del paramilitarismo.

David Escobar Moreno

02 de septiembre de 2025 - 07:00 a. m.
John Fredy Zapata, alias “Messi” o “Candado”, señalado de impulsar financieramente al Clan del Golfo a través de actividades relacionadas con el lavado de activos.
Foto: Cortesía Dijín
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El crimen organizado sabe ponerse disfraces. Cada vez que necesita lavar sus millonarias fortunas provenientes de negocios ilegales, adopta distintas máscaras para mezclarse en la economía legal. En Colombia, los grupos narcotraficantes y del paramilitarismo han encontrado un terreno fértil en sectores tan diversos como el palmero, bananero, ganadero, minero, inmobiliario, el fútbol profesional y, por supuesto, el hotelero. Los ejemplos hablan por sí solos: el Chinauta Resort, el enorme hotel ubicado en Cundinamarca, que perteneció al extraditado capo Justo Pastor Perafán, se convirtió en un emblema de estas fachadas. Y más recientemente, el escándalo que salpicó al cantante Charlie Zaa, señalado por la Fiscalía de ser un presunto testaferro del bloque Tolima de los paramilitares en propiedades que incluían un hotel en Girardot.

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El Espectador contó el pasado domingo que en estos momentos la Fiscalía tiene bajo la lupa un hotel en el centro de Medellín, el cual haría parte de una sofisticada red de lavado de activos que pretendía esconder 240 inmuebles de Antonio Moreno Tuberquia, alias Nicolás, antiguo miembro de la cúpula del Clan del Golfo. Esta organización de origen paramilitar es considerada por las autoridades como la más grande del país con 7.500 integrantes. El hotel en cuestión es el Romanza, ubicado en La Candelaria, pleno centro de Medellín, una zona en la que históricamente hacen presencia grupos criminales, pero al mismo tiempo centro administrativo de las autoridades de la ciudad y el departamento.

Alias Otoniel (izquierda), alias Nicolás (centro) y la abogada Consuelo Parra (derecha)./ Ilustración: Eder Leandro Rodríguez.
Foto: Ilustración

Según la investigación de la Fiscalía, ese inmueble fue adquirido en 2017 por una organización que lavaba activos entre 2014 y 2023. El edificio de 11 pisos, ubicado en el barrio Colón de Medellín, es un hotel de tres estrellas, con 60 habitaciones y cuyo precio por noche oscilaba entre los $95.000 y $150.000. De acuerdo con la investigación penal, el enorme inmueble está avaluado en cerca de $21.000 millones y fue adquirido por un hombre de confianza de la cabeza que lideraba esa red de lavado de activos: Consuelo Ibeth Parra Velandia, conocida en los pasillos judiciales como la “abogada de la mafia”, pues en su portafolio de clientes aparecen capos del narcoparamilitarismo en Colombia.

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Entre ellos, el propio alias Nicolás; Don Berna, exlíder de la Oficina de Envigado; los exjefes paramilitares alias El Alemán, Don Mario, Jorge Pirata, el narcotraficante alias Don Diego; y Otoniel, exlíder del Clan del Golfo. Es decir, Parra representó a los pesos pesados del hampa colombiana en las últimas tres décadas. En los documentos conocidos por este diario, hay interceptaciones de comunicaciones de miembros de la supuesta red de lavado de activos que darían cuenta de que parte de sus negocios al margen de la ley estaban enfocados en la construcción de un hotel en Cartagena. Sin embargo, la obra quedó paralizada por distintos motivos, entre ellos, falta de dinero y los respectivos permisos de las autoridades locales.

Alias El Alemán, Otoniel y Don Mario, fueron algunos de los líderes criminales con los que se relacionó Rivas Ángel./ Ilustración William Niampira.
Foto: Archivo Particular

Esta no es la primera vez que las autoridades identificaban que la organización criminal el Clan del Golfo lavaba dinero a través de hoteles. En febrero de 2024, la Fiscalía General capturó a Ferney Cardona Bello, alias Soya, un narcotraficante del Clan del Golfo que estaba en la mira de la CIA y que tenía entre sus socios a prestantes miembros de la sociedad antioqueña para lavar activos a través del sector inmobiliario.

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El narcoempresario

En el escrito de acusación contra Soya, quien tenía fachada de próspero empresario, es mencionada la finca hotel Balcón del Valle, ubicada en la vía entre Pereira y el municipio de Alcalá. “Esta casa de vacaciones, que tiene nueve habitaciones, es una excelente opción para tu estadía en Pereira. Los huéspedes pueden refrescarse en alguna de las dos piscinas al aire libre y relajarse en la bañera de hidromasaje al final de su día. También dispone de una terraza, un jardín y piscina”, dice una de las promociones que aún circulan en Internet. Ese documento contra Soya cita otro informe en el que la Fiscalía ordena hacerle seguimientos al dueño de ese inmueble por ser un posible miembro del complejo entramado de lavado de activos.

Alias Soya tenía negocios con alias Otoniel y otros líderes del Clan del Golfo.
Foto: Policía

Mario Bros, un hombre de confianza de Otoniel

A pocos kilómetros de esa finca en Alcalá, en el municipio de Quimbaya (Quindío) se ubicaba el ecohotel Las Orquídeas que, según la Fiscalía, era un negocio del Clan del Golfo. En mayo de 2023, el ente investigador, anunció la captura del dueño de esa finca hotel quien, a su vez, era un hombre que servía de enlace entre el propio Otoniel e Iván Márquez, líder de la Segunda Marquetalia. Se trata de Mario Élber Garzón Escobar, alias Mario Bros, señalado por la Dijín de la Policía y la Fiscalía como uno de los cerebros de Otoniel para el lavado de activos. El inmueble, según las autoridades, tenía 15 habitaciones, piscina, caballerizas y amplias zonas verdes, algo más de 35 hectáreas.

El hotel fantasma de alias Messi

En el caso del narcotraficante del Clan del Golfo Jhon Freddy Zapata, alias Messi, quien fue capturado en diciembre de 2020, la empresa que constituyó en el sector hotelero era simplemente una compañía de papel: Operadora Hotelera Génesis SAS. Según la Fiscalía, esa firma era usada para darle apariencia de legalidad a dineros que provenían del narcotráfico. En la que sí había instalaciones era en el hotel y estación de servicio Marianza, ubicada en el corregimiento El Totumo de Necoclí (Antioquia). Es decir, en el corazón operacional del Clan del Golfo. Según las autoridades, el negocio era administrado por alias Perris, un trabajador de confianza de alias Messi.

Los hoteles en Chocó y Santa Marta

En 2017, reportó Caracol Radio, la Fiscalía General realizó una operación de extinción de dominio contra tres hoteles que serían del Clan del Golfo en el departamento de Chocó. Según la cadena radial, “En la lista de bienes los investigadores resaltaron algunos hoteles y extensas fincas que durante años generaron una millonaria rentabilidad, entre otros el Hotel Bahía Sapzurro, y las fincas La Esmeralda y La Patico; y en Trigana, los hoteles El Manglar y Arias. Todas las propiedades de la banda criminal sumaron, según la Fiscalía, más de $53.000 millones de pesos que ahora serán objeto de extinción de dominio”. Sin embargo, desde entonces no se ha conocido detalles de esa operación de las autoridades y las identidades de sus dueños.

Un año más tarde de esa operación, la Fiscalía también decomisó el Hotel Palma Blanca del Mar, ubicado en el concurrido y turístico sector del Rodadero en Santa Marta. En ese momento, la Fiscalía señaló que el bien quedó en manos de la Sociedad de Activos Especiales (SAE), pero no aclaró a que miembro del Clan del Golfo pertenecía. Lo cierto es que la infraestructura hotelera hace parte clave de las estructuras narcoparamilitares para el blanqueo de dinero proveniente del narcotráfico, minería ilegal, entre otras rentas ilegales. Sin embargo, esta no es una modalidad que inventó la estructura de origen paramilitar liderada por Otoniel.

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Los hoteles de las AUC

El 12 de noviembre de 1997, dos semanas después de la masacre de El Aro, El Colombiano captó las primeras imágenes de la destrucción causada por las autodefensas que quemaron el 80% del poblado.

Sus predecesores, las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), al mando de los hermanos Carlos y Vicente Castaño, usaron los hoteles para la planear masacres como para el tránsito y hospedaje de quienes luego cometen este tipo de crímenes de lesa humanidad. La Fiscalía documentó como los miembros del Bloque Mineros de los paramilitares, el cual hacía presencia en las subregiones del Bajo Cauca y Norte de Antioquia, vivían en hoteles que eran claramente identificados por las comunidades; varias de ellas, a una cuadra o al frente de las estaciones de Policía de los municipios.

En el municipio de Caucasia, según la Fiscalía, el sitio de encuentro era el Hotel Piscis, el cual, según exparamilitares, señalaban que su dueño era Jesús Emilio Gonzales, alias Nilo. Allí, en 1999, señaló la Fiscalía, los paramilitares se habrían reunido con Mario Uribe, primo del Álvaro Uribe Vélez y exsenador condenado por sus nexos con los paramilitares. El Hotel Panorama, en el municipio antioqueño de Briceño, fue otro de los asentamientos del Bloque Mineros que operaron allí. En el lugar, señaló la Fiscalía, guardaban armas y municiones.

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En Ituango, como contó hace un par de semanas este diario, la historia habría sido igual. Según los relatos de exparamilitares y ganaderos que financiaron a ese grupo paramilitar, hombres del Bloque Mineros vivieron durante varios meses en el Hotel Bristol, que estaba a una cuadra del comando de Policía. Otro lugar que escogieron para pasar las noches fue el Hotel Ituango. Allí hicieron interrogatorios y, al parecer, asesinaron a varios campesinos, según testimonios recogidos por el ente investigador.

Aunque el proceso contra la abogada Parra está lejos de terminar (y en el que ella insiste que sus negocios son legales), lo cierto es que este recuento de los hoteles asociados a la mafia, muestra un posible patrón: el sector hotelero y los bienes raíces siguen siendo el refugio perfecto para esconder fortunas ilegales del narcoparamilitarismo en Colombia.

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Por David Escobar Moreno

Periodista de la Unidad Investigativa en temas relacionados con narcotráfico, crimen organizado, ciberdelincuencia, delitos ambientales, corrupción y derechos humanos. @Josedem18jescobar@elespectador.com
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