Javier Eliécer Zapata fue, hasta hoy, el gobernador de la Guainía. En medio de la audiencia en la que un juez definió que debe ir a la cárcel, el exfucionario a su cargo de manera irrevocable. La decisión la tomó el Tribunal Superior de Bogotá, luego de escuchar las pruebas y las peticiones que presentó la Fiscalía durante la audiencia que se realizó este viernes 1 de noviembre.
Zapata y el exgobernador Óscar Armando Rodríguez Sánchez, quien también fue enviado a prisión, responderán por los delitos de interés indebido en la celebración de contratos y peculado por apropiación.
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Según la investigación en su contra, ambos gobernadores habrían cometido varias irregularidades en trámites de por lo menos 45 contratos de suministro y obras públicas de la administración departamental.
Estos negocios los habrían firmado las empresas Marina del Oriente, Grupo M.S.I., Fundación Tecnológica Social, e Ingeniería WH SAS. En total, dice la Fiscalía, se desviaron por los menos $86.000 millones que hacían parte de las cuentas oficiales de la gobernación.
La Fiscalía anunció que le imputaría cargos a ambos funcionarios a comienzos de octubre pasado. En ese momento, el ente investigador explicó que, durante la etapa precontractual, Zapata y Rodríguez habrían seleccionado los contratistas, y con la presunta colaboración de la interventora, habrían cambiado los diseños y condiciones del contrato, logrando así alterar la ejecución de los mismos, “por lo cual, al día de hoy, ninguno de los acueductos se encuentra en funcionamiento”.
"Se presume que entre los años 2013 y 2017, cuando Rodríguez Sánchez ejercía como gobernador y, Zapata Parrado (actual gobernador) expresaron su interés en la celebración de los mismos, comprometiendo los recursos de la entidad territorial", agregó el ente investigador mediante un comunicado de prensa.
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La Fiscalía asegura que los recursos que se habrían desviado fueron destinados por el Ministerio de Ambiente, a partir de la celebración del convenio 048 de 2009, para la implementación y ejecución del Plan Departamental de Aguas, “el cual siguió ejecutando irregularmente el gobernador Javier Eliécer Zapata Parrado”.