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Esta semana el suroccidente del país fue blanco de al menos 27 acciones terroristas: 14 en Valle del Cauca y 13 en Cauca. Todas atribuidas a las disidencias de las Farc, al mando de alias “Iván Mordisco”. A menos de una semana de la escalada violenta, las autoridades informaron sobre la muerte en operaciones militares de alias “Cabezón”, uno de los hombres que habría estado detrás de los ataques.
Así lo confirmó el ministro de Defensa de Colombia, Pedro Sánchez Suárez, por medio de una publicación en su cuenta de X. El alto funcionario señaló que alias “Cabezón” habría sido quien planeó los ataques ocurridos en Jamundí, que dejaron un saldo de cinco civiles muertos. La operación se adelantó de manera conjunta entre el Ejército Nacional, la Fuerza Aeroespacial y el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía.
Este hombre era señalado de pertenecer a la estructura Jaime Martínez, de las disidencias de “Iván Mordisco”, que delinque en el suroccidente del país y, de forma concreta, en el departamento del Valle del Cauca.
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“Esta acción se enmarca en la Operación Coraza, anunciada durante el reciente Consejo de Seguridad en Cali. Gracias a inteligencia precisa y a la coordinación interinstitucional, seguimos enfrentando de manera contundente a quienes pretenden sembrar terror, muerte y miedo en el suroccidente del país”, dijo el ministro Sánchez Suárez por medio de una publicación en su cuenta de X.
Por su parte, el general Luis Emilio Cardozo Santamaría, comandante del Ejército Nacional, detalló que alias “Cabezón” no solo habría sido el autor intelectual de los ataques, sino también el encargado de su materialización. Agregó que el operativo en el que murió se dio en la vereda La Cima, del corregimiento de Timba (Jamundí). “Durante la operación, un segundo delincuente resultó herido y huyó”, dijo el general.
En el mismo operativo se logró la incautación de dos fusiles y una pistola, proveedores y municiones de distintos calibres, material de intendencia y propaganda alusiva a las disidencias de las Farc. “El cuerpo del delincuente neutralizado y el material incautado fueron puestos a disposición de la Fiscalía”, informó el comandante del Ejército.
Atentados en Cauca y Valle del Cauca
La jornada del martes 10 de junio fue de zozobra para los habitantes de los departamentos de Cauca y Valle del Cauca: 24 acciones terroristas ejecutadas por las disidencias de las Farc dejaron un saldo de cinco civiles y dos policías muertos, además de al menos 28 personas heridas, incluidos uniformados y menores de edad.
Las acciones se recrudecieron hasta dos días después, cuando estallaron las últimas bombas en Buenaventura (Valle del Cauca), Argelia y Santander de Quilichao (Cauca). En total, fueron detonados cinco carros, tres motos y 12 artefactos cargados con explosivos durante la semana. Además, hubo al menos cuatro hostigamientos con armas de fuego, todos dirigidos a atacar a la Fuerza Pública.
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En el Valle del Cauca se vivió una de las situaciones más complejas. En Cali, tres motocicletas bomba estallaron de forma casi simultánea, cerca a los Centros de Atención Inmediata (CAI) de la Policía en los barrios Los Mangos, Meléndez y Manuela Beltrán.
En el barrio Meléndez, la onda explosiva causó la muerte de un hombre que se dedicaba a cuidar vehículos parqueados en el espacio público. En Los Mangos, la víctima mortal fue el conductor dela motocicleta en la que estaban camuflados los explosivos; al pasar cerca al CAI y acelerar el vehículo, la carga se activó y la detonación acabó con su vida de inmediato.
En el corregimiento de Guachinte, zona rural de Jamundí, un paquete cargado con explosivos fue abandonado sobre una carretera. La detonación del artefacto causó la muerte de tres civiles que estaban cerca al lugar de la explosión y dejó a varios heridos.
La situación fue tan grave, que el presidente Gustavo Petro hizo un cambio en su agenda de promoción de la consulta popular y viajó el 11 de junio al Valle del Cauca, para atender un consejo de seguridad extraordinario, en el que participaron altos funcionarios del gobierno y mandatarios de los departamentos de Cauca, Valle del Cauca y Nariño. También asistió la cúpula militar, los comandantes hicieron un recorrido de verificación durante tres días por la región.
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Justo en esa reunión se definieron una serie de medidas encaminadas a controlar la escalada de violencia en el suroccidente y el Pacífico colombiano. Una de ellas fue el desarrollo de la Operación Coraza, anunciada tras el consejo de seguridad y que permitió en la tarde del 14 de junio la muerte en operaciones de alias “Cabezón”.
Alias “Cholinga” y alias “Mayimbú”: los hombres detrás de los ataques
En el consejo de seguridad de esta semana también se evaluó la conexión entre los atentados y dos personajes claves de las disidencias en la región: alias “Mayimbú” y alias “Cholinga”. Así lo corroboraron las autoridades, tras analizar lo que estaba detrás de los recientes ataques que ocurrieron en Cauca y Valle del Cauca.
El ministro de Defensa y el director de la Policía, general Carlos Fernando Triana, señalaron que una de las razones de la arremetida violenta fue el tercer aniversario de la muerte de Leider Johani Noscue, alias “Mayimbú”, quien fue líder del Comando Coordinador de Occidente de las disidencias de las Farc.
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Pero, además, el mismo día de los ataques en el suroccidente del país, las Fuerzas Militares reportaron la muerte en operaciones de Wilmar Pazú Rivera, alias “Cholinga”, uno de los hombres más buscados por los delitos de secuestro y extorsión. Fuentes de inteligencia le dijeron a este diario que las disidencias de las Farc pudieron acceder a información relacionada con los operativos adelantados para dar con su paradero de “Cholinga”.
Las autoridades le seguían la pista desde hacía bastante tiempo. Ante esta posible filtración de información, las disidencias habrían intentado evitar los operativos a través de acciones armadas. Sin embargo, su plan no funcionó, pues las Fuerzas Militares, en coordinación con la Policía, dieron con alias “Cholinga” en el municipio de Páez (Cauca) y murió en combate ese mismo 10 de junio.
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Por el momento se sabe que las operaciones militares y de Policía continúan en el suroccidente del país, apoyadas con un refuerzo de unidades en sitios estratégicos como el norte del Cauca. “No vamos a permitir que estructuras criminales intimiden a la población ni que los violentos impongan su ley”, concluyó el ministro de Defensa.
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