Ahora a dos más, el exsecretario jurídico de Palacio, Edmundo del Castillo, y el exjefe de comunicaciones de Presidencia, César Mauricio Velásquez, les imputaron cargos por el supuesto montaje de desprestigio y persecución que se armó contra los magistrados auxiliares de la Corte Suprema de Justicia Iván Velásquez y Luz Adriana Camargo, investigadores en esa época de la naciente parapolítica.
Junto a ellos también fueron procesados los abogados Diego Álvarez Betancour, quien fungía como defensor de Diego Murillo Bejarano, alias Don Berna, y Sergio Augusto González, quien tiene una condena por el delito de calumnia por su participación en el complot contra la Corte Suprema. Estos cuatro hombres fueron señalados de participar en las reuniones en la Casa de Nariño en las que se habría ordenado al DAS conseguir información privada de magistrados con el fin de iniciar una campaña de desprestigio.
En la imputación de cargos por los delitos de concierto para delinquir, peculado y violación ilícita de comunicaciones, la Fiscalía advirtió que el objetivo era filtrar a la prensa datos falsos para acusar a los magistrados auxiliares de tener vínculos con narcotraficantes. La Fiscalía agregó que en esas reuniones hacían presencia la exdirectora del DAS María del Pilar Hurtado –condenada a 14 años de prisión por las “chuzadas”–, el exasesor presidencial y hoy congresista José Obdulio Gaviria, el exfuncionario de Presidencia Jorge Mario Eastman y delegados de la Unidad de Información y Análisis Financiero (UIAF).
En la audiencia, tanto Edmundo del Castillo como César Mauricio Velásquez se rehusaron a aceptar los cargos imputados. El próximo 28 de septiembre continuará la audiencia y se establecerá si ambos hombres quedan con restricciones para salir del país.