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En 1.554 páginas, la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia consignó las valoraciones que hizo a cientos de elementos probatorios, testimonios e interceptaciones que reposan en el expediente por la investigación que le adelanta al expresidente y senador Álvaro Uribe Vélez por dos delitos: soborno en actuación penal y fraude procesal. El Espectador revela el documento completo con que se ordenó la detención domiciliaria del congresista, como presunto determinador de una serie de acciones dirigidas a manipular a varios testigos para favorecerse. Estos hechos han sido negados de manera tajante por el exmandatario, quien pidió que se levantara la reserva sumarial de su proceso “como un acto de transparencia frente al país”.
La Sala de Instrucción, en cambio, asegura que el expresidente Álvaro Uribe habría actuado con dolo, “vale decir, con conocimiento de los hechos, conciencia de la ilicitud y la voluntad o querer su realización (...) debe señalarse que el caudal probatorio arroja prueba directa de la participación del congresista. En concreto, por vía de los varios testimoniales que afirman y así se comprobó que la petición de retractarse, como en el caso de Juan Guillermo Monsalve, o de extender declaraciones a su favor y de su hermano, que fue lo acaecido en el de Carlos Enrique Vélez, provino directamente del senador; ello, además de que la prueba indiciaría es abundante, clara, inequívoca y concluyente, de su condición de determinador de las conductas punibles avistadas”, dice la decisión.
Por considerarlo un caso de interés nacional, tal como lo ha señalado la propia defensa del senador Uribe, El Espectador se permite divulgar en su integridad el documento con que la Corte definió la situación jurídica del expresidente. La próxima gran decisión a tomar en este caso será la de llamarlo a juicio o precluir el proceso.