Colombianos presos en Ecuador serían llevados a cárceles del Valle, dice INPEC

El futuro de los colombianos presos en Ecuador y que serían devueltos a Colombia aún no es del todo claro. Mientras que las autoridades de ambos países revisan las condiciones en las que los privados de la libertad llegarían a su país de origen, desde el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC) advierten que estas personas serían ubicadas en varios penales del Valle del Cauca.

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Según el director del INPEC, coronel Daniel Gutiérrez, Ecuador aún no envía toda la información relacionada con los presos que llegarían a Colombia, pero que preliminarmente los únicos penales con espacio para recibir a más personas son los que están en Jamundí, Buga y Palmira.

Por otra parte, Gutiérrez dice que los centros carcelarios de Antioquia están llenos y no tiene la capacidad de recibir a más personas. A su vez, algunas cárceles del centro del país, que no sean la Picota o la Modelo, sino las más pequeñas, podrían tener algo de espacio para recibir a los colombianos que sean devueltos de Ecuador.

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“Físicamente, no hay campo, pero también hay que partir del hecho de que allá (Ecuador) han dicho que son 1.500, pero no tenemos información o real de cuántos en realidad son”, dijo el coronel Gutiérrez en declaraciones entregadas en la tarde de este miércoles.

Sobre el regreso de colombianos presos en el vecino país, el pasado 10 de enero el ministro de Justicia Néstor Osuna dijo que existen unas directrices para la repatriación y la expulsión implica que el gobierno del vecino país voluntariamente los deja en libertad, con lo que al llegar a la frontera podrían seguir así, si no tienen procesos pendientes con la justicia colombiana.

Desde el Ministerio explicaron que vienen dándose conversaciones con la Cancillería de Ecuador y planteando la posibilidad de una repatriación concertada entre los dos países, un éxodo que debe estudiarse caso a caso y que debe ser pedida de manera voluntaria por el recluso. Osuna afirmó también que “nunca se habló de expulsión, ni de deportación”, una opción que sería completamente diferente, pues tiene otras implicaciones.

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