Giancarlo Auque de Silvestri fue condenado por el delito de tortura agravado contra la periodista Claudia Julieta Duque. La decisión es del juzgado décimo penal especializado de Bogotá, que lo sentenció a 12 años y medio de cárcel y a pagar una multa de 1.200 salarios mínimos legales. Además, pidió circular roja de Interpol para ubicar al exfuncionario, de quien poco se sabe desde 2016 cuando fue dejado en libertad.
Según la investigación que llevó a la condena de Auqe de Silvestri, como director de inteligencia del Departamento Administrativos de Seguridad (DAS), en octubre de 2004, el exfuncionario participó de un plan que tenía como objetivo torturarla psicológicamente. Una estrategia criminal que ocurrió cuando la periodista estaba en medio de sus investigaciones por el crimen contra Jaime Garzón.
Según se lee en la sentencia, Giancarlo Auque de Silvestri hizo parte de ese plan criminal que se implementó durante varios años “con el fin de castigarla a Duque por la actividad investigativa que realizó, usando para tal fin intimidación a su hija”. Además, fue uno de los gestores del grupo denominado G3 que se usó para perpetrar crímenes en contra de periodistas y políticos que, en ese momento, eran de la oposición.
Lea aquí la sentencia:
La sentencia describió así esa agrupación: “El G3 contó con toda libertad para usar equipos y vehículos, personal e infraestructura del DAS, desde detectives, investigadores, fuentes humanas, hasta directores y subdirectores generales, entre ellos el acusado (Auque de Silvestri) para obtener información de inteligencia de la citada periodista, medio para torturarla".
Sobre la responsabilidad del entonces director de inteligencia, el fallo explicó que utilizó sus conocimientos y jerarquía en el DAS, “así como recursos públicos, para realizar actividades ilegales, como los seguimientos, interceptaciones sin orden judicial, hostigamientos y amenazas denunciados por la víctima con el fin de cumplir con un objetivo misional y favorecerse a terceros”.
Todo, señaló la jueza del caso Martha Cecilia Artunduaga Guaraca, con el único propósito de que Claudia Julieta Duque no investigara y colocara en tela de juicio “el proceder del DAS y a las personas que descubrió que planearon y ejecutaron el homicidio de Jaime Garzón Forero”, perpetrado el 13 de agosto de 1999.
La periodista continuó con su labor y nunca cedió ante esta presiones. Lo que la Fiscalía ha logrado investigar es que varios directores del DAS, así como funcionarios de esa entidad, habrían participaron en el homicidio del periodista y, luego, se encargaron de desviar las investigaciones que podían ponerlos en problemas judiciales.
Sin embargo, la única persona condena por este caso es el exdirector del DAS José Miguel Narváez, quien fue hallado responsable y se encuentra pagando una pena de 26 años de cárcel. Según el fallo en su contra, el exfuncionario habría aprovechado su estrecha relación con el exjefe paramilitar Carlos Castaño Gil para sugerirle atentar contra la vida del periodista, a quien señalaba de ser afín a la guerrilla de las Farc.
Precisamente esos vínculos criminales eran los que estaba investigando Claudia Julieta Duque cuando fue torturada psicológicamente. En su caso ya fueron condenados nueve personas, entre ellos dos exjefes de inteligencia del DAS, Carlos Alberto Arzayús en 2015 y Enrique Ariza Rivas en 2024.
La jueza Martha Cecilia Artunduaga Guaraca le dedicó un apartado completo a la violencia de género que sufrió Duque. “Es claro que contra Claudia Julieta Duque Orrego se ejecutaron actos de violencia psicológica, no solo por su profesión de periodista, sino también al ser precisamente una mujer”, puntualizó Artunduaga.
“En los contextos de conflicto armado, la violencia de género y de forma particular aquella psicológica que se ejerce por prolongados periodos, se utiliza a menudo como una estrategia de guerra para humillar, deshumanizar y controlar a la población civil. En el caso de Duque Orrego la finalidad fue impedir su trabajo investigativo, callar su voz frente a los actos de corrupción que detectó al interior del DAS y, el hecho de que un organismo del Estado quiso dejar en la impunidad un grave crimen como fue el homicidio de Jaime Garzón Forero”, se lee en la sentencia.
“Es claro que los hechos perpetrados en contra de la periodista Claudia Julieta Duque Orrego, en su integridad psicológica y emocional, se deben valorar diferencialmente como actos de violencia de género y discriminación por su profesión, pues además de amedrentar a la mencionada, dicha violencia fue utilizada como forma de castigo frente a su actividad periodística e investigativa”, agregó la jueza Artunduaga.
Además de la condena contra Giancarlo Auque de Silvestri, la jueza del caso le ordenó a la Presidencia publicar el fallo completo en contra de este exdirectivo del DAS y solicitó que en su contra se expida una circular roja de Interpol para dar con su ubicación en cualquier país del mundo para que cumpla con este fallo judicial de primera instancia.
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