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Una jueza de control de garantías decidió enviar a la Corte Suprema de Justicia el expediente de Jesús Santrich, quien fue capturado el pasado viernes a su salida de La Picota al sur de Bogotá. La defensa del exjefe de las Farc señaló que ese juzgado debe declararse impedido puesto que, según los abogados, el exnegociador del desaparecido grupo subversivo es congresista y, por ende, debe ser juzgado por el alto tribunal. La funcionaria judicial señaló que la Corte tendría tres días para resolver esta situación. Mientras tanto, Santrixh seguirá detenido en el búnker de la Fiscalía.
Para la jueza del caso, Santrich nunca se posesionó como representante a la Cámara y, por ende, la investidura de congresista jamás la tuvo. Incluso, actualmente, la curul está ocupada por Benedicto de Jesús González del Partido Farc. Teniendo en cuenta esta argumentación, la jueza señaló que ella sí sería competente para adelantar la audiencia de imputación de cargos y medida de aseguramiento.
Por otra parte, la defensa de Santrich señaló que durante la audiencia de legalización de captura la jueza prejuzgó sobre la medida de aseguramiento etapa del proceso que se llevará a cabo más adelante. Por tal motivo, la defensa del exjefe guerrillero recusó a la jueza del caso y, por ende, un togado superior (un juez de conocimiento) decidirá si el recurso tiene validez.
El exjefe guerrillero de las Farc, Jesús Santrich, llegó fuertemente custodiado por miembros de la Policía a los juzgados de Paloquemao, donde se llevó a cabo la audicencia de imputación de cargos por los delitos de concierto para delinquir y narcotráfico. El pasado viernes, el ente investigador señaló que cuenta con nuevas pruebas de “tiempo modo y lugar”, las cuales darían cuenta de que el exnegociador de la guerrilla en La Habana haría parte de una osociación ilícita para enviarle concaína al Cartel de Sinaloa.
>>La recaptura de “Jesús Santrich” a la salida de la cárcel fue legal
El exjefe guerrillero, quien arribó al complejo judicial alrededor de las 2:00 p.m en una tanqueta de la fuerza pública, estuvo recluido este fin de semana en la Clínica Méredi, luego de que se determinara que no se encontraba en condiciones para afrontar las diligencias judiciales. Fue por esta razón que la legalización de captura se realizó en el centro médico y de manera privada. Mientras los medios intentaban acercarse al exjefe guerrillero a su entrada a los juzgados este gritaba “Viva la Soberanía de Colombia” y con sus manos hacía el símbolo de paz y amor. Minutos antes del inicio de la audiencia Jesús Santrich almorzó y habló con sus abogados Gustavo Gallardo y Eduardo Matyas.
>>Según la JEP, estas son las irregularidades de la DEA y la Fiscalía en el Caso Santrich
"No hay mejor forma de alcanzar la libertad que luchar por ella, Simón Bolívar. Espero que esta audiencia contribuya a dar un paso a la paz y no a la ratificación de la calificación de república bananera que tiene nuestro país", señaló Jesús Santrich cuando la jueza del caso le pidió que se presentara en la audiencia. Posteriormente, el exjefe guerrillero le pidió a la togada que le hiciera un resumen sobre lo que había pasado durante la audiencia de legalización de captura pues, según él, recordaba poco lo que sucedió en esta. A continuación, la jueza, además de dar un breve resumen de esa audiencia, señaló que Santrich dio muestras de que estaba consciente en el centro clínico.
El pasado miercoles la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) decidió que el excomandante Jesús Santrich no sea extraditado a los Estados Unidos, país que lo acusó de conspirar para enviar cocaína a ese país. Sin embargo, solo hasta el viernes Jesús Santrich cobró por algunos segundo la libertad. Pues, cuando llevaba algunos instantes fuera de la cárcel, miembros del CTI de la Fiscalía General lo capturaron. El ente investigador señaló que contaba con nuevas pruebas para detenerlo, entre ellas, el testimonio de Marlon Marín, quien fue capturado con el propio Santrich por estos hechos. Sin embargo, Marín es testigo protegido de los Estados Unidos.
>>El misterioso mexicano en el caso “Santrich”
Hace más de un año, el 9 de abril de 2018, el país quedó atónito cuando la Fiscalía General anunció la captura de uno de los negociadores del Acuerdo de Paz en La Habana. La detención de Santrich se llevó acabo porque, según la Fiscalía, este sería parte de una organización ilícita para enviar cocaína desde Colombia hacia Estados Unidos. En esa organización haría parte Marlon Marín, sobrino del también exjefe guerrillero Iván Márquez, que fue capturado y se convirtió en testigo protegido de la DEA.
La Fiscalía presentó a medios de comunicación audios y videos en los que Santrich discute supuestamente el envío de 10 toneladas de cocaína al exterior con Marlon Marín, el abogado Fabio Simón Younes Arboleda y Armando Gómez España. En la conversación participa un supuesto delegado del reconocido narcotraficante del cartel de Sinaloa mexicano, Rafael Caro Quintero. Esa persona sería en realidad un agente infiltrado de la DEA.
La captura generó un revuelo político y jurídico alrededor de Santrich, quien había sido elegido como congresista del partido político de la Farc. Desde entonces, el exjefe guerrillero ha buscado ante la justicia poder posesionarse en el cargo desde la cárcel La Picota. Incluso realizó una huelga de hambre que duró 40 días. Santrich no se ha posesionado en el cargo, pero el Consejo de Estado le mantuvo su investidura porque no hay una condena en Colombia en su contra, entre otras razones.
En reiteradas ocasiones, Jesús Santrich se ha declarado inocente y que su caso es un montaje y un ataque al proceso de paz. Además, ha dicho que nunca, ni en la guerrilla, traficó drogas. El 8 de junio de 2018, llegó formalmente a la Jurisdicción Especial de Paz la solicitud de extradición de la justicia estadounidense. Sin embargo, la JEP dijo que, en las pruebas aportadas por la DEA, no quedaba claro si las supuestas acciones ilegales de Santrich fueron cometidas después del 1 de diciembre de 2016.
Esa fecha es clave en el Acuerdo de Paz pues todo delito que un actor del conflicto haya cometido después de esa fecha, quedará en manos de la justicia ordinaria. De lo contrario, si se cometió antes del 1 de diciembre de 2016, el caso quedará en manos de la JEP quien decidirá si aplica o no la garantía de no extradición. El 23 de octubre de 2018, el Tribunal de Paz de la JEP volvió a pedir las pruebas sobre el caso Santrich a Estados Unidos por medio de una carta que tramitó el Ministerio de Justicia. Sin embargo, en enero de este año, según la ministra Gloria María Borrero dijo que esta nunca llegó y que se perdió por un problema logístico de la empresa estatal de correos 4-72.
La esperada respuesta llegó hasta el 26 de febrero de 2019, en la que la justicia de Estados Unidos informó que no aportará más pruebas, porque en la acusación estarían todos los soportes para pedir en extradición a Santrich. Con esa respuesta, la JEP siguió el trámite. El pasado 15 de mayo, la jurisdicción especial le otorgó al exjefe guerrillero la garantía de no extradición y ordenó su libertad inmediata. Dos días después, el viernes 17 de mayo, Santrich fue dejado en libertad pero inmediatamente recapturado por la Fiscalía.