Desde 1971 no veía una solidaridad tan fuerte entre universidades: Mauricio Archila

La semana pasada ocurrieron dos hechos relevantes en el movimiento estudiantil. Por un lado, estudiantes de universidades públicas y privadas se unieron el pasado 27 de septiembre para marchar de forma pacífica, en rechazo a los hechos de corrupción que estarían ocurriendo en la Universidad Distrital, así como por los excesos del Esmad (Escuadrón Móvil Antidisturbios de Policía) en las protestas de lunes y martes de la semana pasada. Y, por otro, uniformados del Esmad irrumpieron en la Universidad Javeriana, algo de lo que no se tiene registro que haya ocurrido antes. 

En ese contexto, El Espectador habló con el profesor Mauricio Archila, docente de la Universidad Nacional e investigador del Cinep, quien ha documentado y estudiado por más de 40 años la protesta social en Colombia. El profesor reconoce que la entrada del Esmad a la Javeriana no tiene precedentes, pero también señala que la "gran muestra de solidaridad" de estudiantes de universidades privadas con la situación de la Distrital, tampoco se ha visto antes, o, por lo menos, no en mucho tiempo. 

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Tuvimos una semana llena de protestas de universitarios en las cuales, a todas, llegaron agentes del Esmad. Hasta a la del pasado viernes, que fue convocada para rechazar la violencia policial en los primeros días, ¿cuál es su lectura de todo esto?

Tengo que confesar que no hay una lectura todavía ponderada de esto, porque he vivido los acontecimientos que se han presentado, entonces no tengo la distancia para hacer un juicio. De igual forma, creo que lo que pasó la semana pasada, son dos cosas interesantes: Por un lado, la solidaridad estudiantil, de la Javeriana con los de la Distrital, que protestaban por la corrupción allí; y, luego, prácticamente, todos los estudiantes de las universidades de Bogotá. Eso sí se ha manifestado de vez en cuando, pero desde 1971 no veía una muestra de solidaridad tan fuerte entre universidades privadas y públicas. Eso habla de un fenómeno interesante, llama la atención que los estudiantes hayan reaccionado respaldando a los estudiantes de la Distrital.

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Y lo segundo que se destaca es la acción del Esmad, que no sé como calificarla, pero es muy discutible, criticable. Por ejemplo, la respuesta tan violenta y brutal a una solidaridad de los estudiantes de la Javeriana, el entrar prácticamente hasta el Hospital San Ignacio, es algo que uno dice como: ¿qué está pasando en el Esmad? Yo siento que desde las marchas estudiantiles de noviembre del año pasado, el Esmad está desbordado, en una respuesta desproporcionada.

¿Cómo se entiende que una protesta como la del viernes, convocada para rechazar los disturbios y la reacción del Esmad de lunes y martes, termine, también, en disturbios y hechos violentos?

Yo recogería lo que decía Catalina Botero, decana de Derecho de la Universidad de los Andes, en la mañana del viernes, un poco anticipando lo que iba a ocurrir: no se le puede endilgar a las marchas el accionar de algunos cuantos encapuchados. El 90% de la protesta fue pacífica y hubo un 10% que no, como lo que pasó en el edificio del Icetex. Evidentemente por parte de los organizadores la convocatoria era una marcha pacífica. Pero aquí uno no puede excluir que seguramente hubo, desde provocadores, como por ahí hay rumores, hasta otros grupos. Sin duda, yo creo que el rearme de Márquez y Santrich pudo haber motivado a un sector de milicias bolivarianas o del Eln a pasar a la acción otra vez, pero no quisiera decir algo con seguridad porque ningún grupo se lo ha reivindicado.

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Cada vez que se presentan esta clase de enfrentamientos o disturbios en los que se cuestionan las acciones del Esmad se propone que se desmonte esta unidad de la Policía, ¿eso es viable?, ¿por qué no ha ocurrido todavía?

Bueno, ese tema sí me desborda un poco. Sé que, por ejemplo, Alirio Uribe, cuando estuvo en el Congreso el periodo pasado propuso una disolución y una transformación del cuerpo del Esmad. Ahora, según nuestra base de datos, el 85% de las confrontaciones que ha habido en las protestas entre ciudadanos y Fuerza Pública, ha sido con el Esmad. Entonces creo que sí es posible pensarlo, sopesadamente, que se desmonte esa unidad. Hay unas cosas que aparecen en la ley, en el Código de Policía, del uso medido de la fuerza, que no se están cumpliendo, por lo que sí creo que valdría la pena que esto se llevara al Congreso, pero ahí las mayorías no están muy favorables a una modificación radical del Esmad. 

Muchos estudiantes denuncian que habría policías infiltrados en las marchas y que ellos serían los encapuchados, ¿qué dice la evidencia sobre ese punto?

Históricamente eso es lo que se ha dicho, sí. Eso se contempla en los Códigos de Policía, cuerpo policial que se respete tiene funciones e intenciones de infiltrar. Pero a mí no me consta, ni tengo certeza de que haya habido infiltrados el viernes. 

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La semana pasada, el Esmad entró a la Javeriana y estuvo en los alrededores de los Andes, que son, como decíamos, universidades privadas que nunca habían protagonizado este tipo de noticias, ¿qué lectura hace de esto?, ¿no es la primera vez que antidisturbios entra a la Javeriana?

Sí, eso sí. Yo fui estudiante de la Javeriana y me gradué de allá y nosotros sí participamos en el gran movimiento por la educación de 1971, pero que yo recuerde, que entrara la Fuerza Pública a la Javeriana, no, nunca. ¿Qué ha pasado? No podría decir porque hace rato no estoy vinculado a la institución, pero creo que sí hay unos procesos de formación ética que hacen que los muchachos sean más sensibles que hace unos años.

Yo lo veo como algo positivo, pero del establecimiento no faltará quién diga que les están lavando el cerebro, pero, por el contrario, son procesos de educación desde una mirada mucho más universalista y liberal (en el sentido filosófico, no político). Uno ve que la Javeriana tiene condiciones de mayor apertura que otras universidades, como es tener profesores LGBTI o reconocidos como de izquierda, cosas que hace unos años no se veían y que cada vez la hacen más humanista. Eso, me imagino, puede estar influyendo en la educación de los estudiantes allí. 

¿Ha visto algún cambio en el discurso de los estudiantes que convocan a la protesta respecto de las del año pasado?

No veo mucho cambio en relación con las de octubre o noviembre del año pasado. Lo único es que ahora es una muestra de solidaridad con una universidad que está viviendo procesos de corrupción tremendos, pero no me atrevería a decir que hay una inflexión allí, sino más bien que se mantienen las tendencias que vienen de hace unos años de amplia participación, asambleas que no son lo torneos oratorios de antes, sino espacios para que la gente participe. 

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Pero las causas de la protesta siguen siendo las mismas...

Sí. De hecho, esta mañana los mismos estudiantes que hicieron el acuerdo con el gobierno el año pasado decían que el gobierno no les está cumpliendo. Es decir, es previsible que la cosa se complique, en términos de más movilizaciones estudiantiles. Y, aunque yo no soy quién para decir si las va a haber o no las va a haber, el ambiente está muy complicado y la gente está muy molesta con las respuestas del Esmad, así que hay un caldo de cultivo para que haya más protestas.