Este miércoles 30 de noviembre podría iniciar el juicio contra José Manuel Gnecco Valencia por el asesinato de su esposa, María Mercedes Gnecco, del que se ha declarado inocente. O podría acercarlo hacia la libertad. Radicado en San Andrés desde hace años, el abogado Gnecco está detenido desde julio de 2022, por el homicidio de su pareja, ocurrido también en la isla. Sin embargo, la familia de la víctima advierte que el juzgado que lleva el caso no programó más audiencias para este año, salvo la de esta semana, y si el juicio no comienza, el hombre podría quedar libre por vencimiento de términos.
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(En contexto: Por el asesinato de su esposa, el abogado José Gnecco fue acusado formalmente)
“Estamos hablando de alguien que no solamente lleva preso cinco meses, sino que es un tipo furioso y que, presuntamente, ya mató. No digo esto pensando únicamente en que él tiene que pagar y que se tiene que hacer justicia, sino pensando en cómo hacer para que él deje de destruir a nuestras vidas”, le dijo a El Espectador Cristina Serrano Gnecco, hija de María Mercedes, quien reside en Bogotá. En silencio, esta panadera de 27 años se ha apersonado del expediente, ha aprendido algo de derecho penal entre las audiencias y ha dejado que la justicia actúe.
Al inicio, José Manuel Gnecco dijo que a su esposa, comunicadora de profesión y profesora de inglés, la habían baleado dos ladrones que intentaron entrar a su casa en San Andrés. Con el tiempo, se mostró que esa no sería la verdad. “Eventualmente, las pruebas y la evidencia van girando la atención hacia él y cuando lo capturaron para nosotros fue tan chocante, que ni siquiera dudamos que la justicia estaba haciendo todo bien”, añadió Cristina Serrano. Hasta que el juzgado que lleva el caso comenzó a tomarse más tiempo del que podría considerarse normal para el inicio del juicio.
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La familia de la víctima teme que, con dilaciones, se retrase el comienzo del juicio y advierten que el presunto asesino también está siendo procesado por delitos como alteración de pruebas y falsificación de documentos. Así las cosas, si el juicio no arranca y el juzgado no agenda más audiencias para lo que queda de 2022 —además, teniendo en cuenta que funcionarios judiciales se van de vacaciones desde el 16 de diciembre—, a partir de la última semana de diciembre, José Manuel Gnecco podría radicar una solicitud de libertad. “Tenemos toda en contra”, dijo la hija de la víctima.
Cristina Serrano aclara que no tiene afán alguno con que el caso se defina pronto, pero sí teme de represalias porque estar tan involucrada en el proceso ya le ha pasado factura. “Una vez que fui a la Fiscalía a llevar un computador de mi mamá y otras cosas que quizás podrían servir. Pero me llegó un mensaje de texto anónimo que decía: ‘Por el bien de todos, mantén la distancia’”, contó. Y, aunque dudó mucho si hablar en medios de comunicación, considera que es importante que el caso de su madre se conozca para que casos de violencia similares se puedan advertir a tiempo.
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En entrevista con este diario, la hija de María Mercedes Gnecco reflexionó: “Yo tuve muchísimos instantes en la relación de ellos, que yo no estuve conforme con conductas de él, porque siempre me pareció un racista, insultante, y en nuestra casa la narrativa era: ‘es que él es así’. Este caso demuestra que todavía vivimos en un contexto en el que a los hombres con poder y dinero se les perdona absolutamente todo. Y la impunidad constante con que ellos viven es lo que tenemos que cambiar, para que no llegue a un asesinato”.
Por el homicidio y porque al parecer intentó encubrirlo posteriormente, la Fiscalía le imputó a José Manuel Gnecco los delitos de homicidio agravado; fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego; falsedad ideológica de documento privado; y ocultamiento, alteración o destrucción de elemento material probatorio. Él se ha declarado inocente y su defensa dijo en un comunicado reciente que el ente investigador estaba cometiendo “una de las más grandes injusticias que haya ejecutado” al llevarlo a juicio, “garantizándoles la más absoluta impunidad” a los supuestos ladrones que, según el abogado, mataron a María Mercedes Gnecco.
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