El Zoológico y Acuario de Columbus, ubicado en Ohio, Estados Unidos, anunció con gran pesar la noticia del fallecimiento de la querida jirafa reticulada Shaggy.
“Shaggy fue una de las jirafas originales para adornar la región del corazón de África del zoológico, llegando aquí en otoño de 2013 desde el zoológico de la montaña de Cheyenne, donde nació”, indica el Zoológico y Acuario de Columbus en redes sociales.
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Shaggy era uno de los miembros más queridos del recinto. Durante 22 años, se robó los corazones de varios visitantes. A este animal le encantaba rascarse las piernas en montones de troncos y palos, siempre colocando un pie en el medio. Además, adoraba la lechuga.
Según Giraffe Worlds, las jirafas reticuladas, como Shaggy, tienen una altura de cuatro a cinco metros y un peso de alrededor de 1,180 kg. “Sus manchas están muy bien definidas y mantienen un color marrón uniforme en cada una de ellas. Cubren la mayor parte de su cuerpo, incluso el rostro y cola, y están posicionadas de tal manera que entre ellas se muestran delineados blancos estrechos y muy bien marcados, dando como resultado la exhibición de una piel delicadamente hermosa”, indica el portal especializado.
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Lamentablemente, estos animales están catalogados en peligro de extinción. “Leones, cocodrilos y hienas son serias amenazas para ellos, pero ninguno tan despiadado como el ser humano. Los cazadores furtivos aprovechan la cola y la piel para fabricar pulseras, matamoscas y cordones”, agrega Giraffe Worlds.
¿Cómo murió Shaggy?
Según el Zoológico y Acuario de Columbus, Shaggy se enfermó gravemente durante el fin de semana. Ante esto, el equipo médico del sitio empezó a hacer todo lo posible por su recuperación. Sin embargo, y a pesar de los esfuerzos, el animal no mostró mejoría, por eso, programaron un procedimiento de emergencia.
“Fue anestesiado para permitir un examen y tratamiento más minucioso, y esa evaluación reveló una enfermedad significativa. Además, sufrió una lesión durante el examen de emergencia, así que, con el bienestar de Shaggy en mente, se tomó la difícil decisión para la eutanasia humana”, explica el sitio.
Shaggy siempre será recordado con gran cariño. “El equipo está muy agradecido por los innumerables momentos y recuerdos maravillosos que compartieron con esta extraordinaria jirafa”.
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Sacrificio de Penny
El pasado 5 de octubre, el Zoológico de Columbus también informó sobre el fallecimiento de Penny, un manturón, también llamado binturong o gato osuno negro, de 13 años. Cabe resaltar que estos animales desempeñan un papel crucial en sus hábitats nativos al ser agentes importantes para la dispersión de semillas.
“Penny estaba programada para someterse a un procedimiento para reparar una lesión en el tobillo. Sin embargo, durante el examen, se descubrió que tenía cambios extremos en su corazón. Sabiendo que la insuficiencia cardíaca era inminente y que era lo mejor para ella, su equipo de atención tomó la difícil decisión de sacrificarla humanamente”, aseguraron en ese momento.
Penny siempre saludaba a los miembros del equipo cuando pasaban, participaba con entusiasmo en las sesiones de capacitación y tenía un amor especial por las golosinas.
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